Pedro Piqueras ha entrevistado a Ángel Víctor Torres, el Presidente de la Comunidad Autónoma de Canarias, sobre la última hora de la situación que se está viviendo en La Palma, mientras se podía escuchar de fondo las explosiones producidas por el volcán.
El volcán Cumbre Vieja lleva tres días expulsando lava de manera incesante, lo que ha obligado a desalojar a miles de vecinos que veían impotentes como la lengua de fuego abrasaba lo que tanto les ha costado construir.
En estos momentos el punto de atención en La Palma es el pueblo de Todoque, donde se encuentra una de las coladas de lava destruyendo la zona. El presidente canario señala que como se preveía “la lava va aun ritmo lento, las coladas que tienen una gran anchura de hasta 200 metros, ha llegado al comienzo de Todoque y lamentablemente no podemos hacer nada, el avance es inexorable” y como destaca “lamentablemente no se pude hacer nada, no hay ningún mecanismo que pueda parar” la lava.
Víctor Torres expresa la impotencia, sentimiento generalizado, de la llegada de la lava al núcleo urbano: “ahí viven cerca de 1.400 personas y dependiendo de cómo sea el camino que adquiera se verán afectada una mayor parte”
Hasta el momento “ha habido una importante afección, se habla de 180 edificaciones-casas, garajes, piscinas- el daño es tremendo y ojalá el número final sea menos de lo que algunos nos trasladan. Es un daño dramático en la sociedad palmera”
Pedro Piqueras ha destacado que gracias a las previsiones se pudo evacuar a los habitantes los lugares afectados, pero la pérdida de las viviendas y las pertenencias es un drama personal.
“Con todo el dolor de lo que significa perder las casas, había mucha preocupación de por dónde podría salir el volcán, si sería por un núcleo urbano, pero por suerte y a día de hoy, y espero que así termine, no tenemos que lamentar ningún daño personal, ningún fallecido” expresa aliviado Torres.
El presidente canario ha resaltado el momento crítico de todo este fenómeno y es “cuando la lava llegue al mar, es peligroso y por tanto hago un llamamiento de que nadie se puede acercar al volcán. Estamos en horas muy relevantes y tendremos que esperar a ver cómo evoluciona en las próximas horas y los próximos días”
En cuanto a los evacuados “la gran mayoría se encuentran en casa de familiares o de amigos, aquellos que tenían problemas de movilidad al acuartelamiento. La sociedad palmera lo que ha hecho es acoger en su misma isla a quienes han tenido que dejar sus viviendas. Lo importante es ahora estar al lado de ellos, es un hecho de la naturaleza, pero que deja un gran drama detrás” por lo que las ayudas anunciadas por el presidente del Gobierno para recompensar del desastre a los afectados será imprescindible.
Torres recalca que por el momento “no podemos hacer una previsión de los cuantiosos daños, de algo que comenzó hace apenas 48 horas, pero van a ser tremendos…para poder acceder a esas ayudas tenemos que tener daños de 400 millones de euros que es el 1% de nuestro PIB”, pero el presidente canario adelanta “que serán muchísimos más”