La altura de las coladas de lava del volcán de La Palma en algunos puntos en los que alcanza los 80 metros de altura. Ya son más de 2.000 edificaciones destruidas, y de ellas 1.300 son viviendas. Esta noche ha seguido la actividad sísmica con más de medio centenar de temblores y empiezan a aparecer grietas en carreteras y casas de muchos vecinos.
El volcán de La Palma está en fase efusiva, expulsa más lava y registra menos explosiones. Sin embargo, no muestra signos de ralentización. Todas las bocas siguen activas y la lava brota sin descanso.
Si nos adentramos en el cráter principal alarma la intensa actividad. Además de piroclastos, el volcán lanza rocas de hasta dos metros de diámetro, que caen con fuerza por la ladera.
La sismicidad sigue preocupando, con múltiples temblores que superan los tres grados y medio. Ha habido nueve temblores por encima los 4 grados.
El volumen de dióxido de azufre deja un dato para la esperanza con cuatro días de descenso consecutivo. De las 53.000 toneladas registradas el lunes hemos pasado a 16.000, aunque aún queda lejos de las 100 toneladas que marcarán el deseado final.