Según el informe del Observatorio de Sistema Universitario (OSU), los colegios concertados y privados españoles inflan las notas de Bachillerato con sobresalientes mientras que los públicos tienden a calificar con aprobados. Así se ha concluido después de comparar, con datos oficiales, las notas académicas con las conseguidas en la fase general de las Pruebas de Acceso a la Universidad (Pau) a la que se han enfrentado 200.000 estudiantes.

Para calcular la nota de corte se utiliza el 60% de la nota media conseguida en Bachiller y el 40% restante de la obtenida en la fase general- una vez que se publican los resultados- de la selectividad. Los estudiantes se enfrentan a dos factores que determinarán su futuro: la comunidad autónoma donde estudie y la titularidad del centro educativo. La diferencia entre los colegios públicos y privados es de 9,5 puntos en Bachiller y de 2,8 puntos en la fase general, lo que supone una gran diferencia para conseguir el acceso a carreras con alta demanda.

La diferencia más elevada se registra en la Comunidad Valenciana donde un 18,5% de los estudiantes obtienen excelente en Bachillerato y tan solo un 2% de ellos consigue sacar nota en las PAU. En Galicia, solo el 6,5% de los alumnos obtiene un sobresaliente en el examen de acceso frente al 20,8% que lo tiene en Bachiller. En Canarias, del 28,5% que saca excedencia, solo el 6,5% lo tiene en la selectividad.

En comunidades como La Rioja, Cantabria o Castilla y León la diferencia es ínfima y tan solo el porcentaje de sobresaliente en Bachiller es de casi el doble que en las fases generales. El porcentaje medio de estudiantes con sobresaliente en Bachiller es mayor en centros privados y concertados que en los públicos. A excepción de Cataluña, donde la mayor proporción de estas notas altas son en los concertados.

Algunas comunidades como Murcia (con un 28,2%), Canarias (28,1%) y Extremadura (25,4%) encabezan los porcentajes altos de jóvenes con notas de Bachillerato entre un 9 y un 10, sin importar el tipo de centro educativo. En referencia a la fase general de las PAU, el número de estudiantes con buenas notas es seis veces superior en Asturias que en Baleares. El número más bajo se obtiene en Cataluña con un 10.8% de alumnos con nota de sobresaliente.

Vera Sacristán, del Observatorio del Sistema Universitario, propone tres soluciones. La primera basada en darle más peso a la nota de la fase general de las PAU que a la de Bachiller. La segunda es solucionar el desequilibrio a través de la publicación anual de las notas de los institutos, de la fase general y de la específica. La tercera, aplicar criterios de corrección de las PAU más homogéneos y coordinados entre comunidades autónomas para dar un sesgo más equitativo.