Feijóo acusa a Sánchez de "vivir de empobrecer" a las clases medias y le pide que dimita: "Es urgente derogar el sanchismo"

El Senado reconvertido hoy en plató televisivo de un debate electoral oficioso a un mes de las elecciones autonómicas y locales del 28 de mayo. A un lado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al otro el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, contraponiendo sus dos modelos de país y de gestión en su último duelo antes del 28M. Sánchez armado con el BOE prometía 20.000 nuevas viviendas públicas de alquiler asequible en terrenos de Defensa y delimitaba así un terreno de juego en el que parte con ventaja.

Una promesa de la que se ha mofado Feijóo. "Parece el milagro de los panes y los pisos", ironizaba restando toda credibilidad al anuncio y recordando que son las comunidades autónomas y los ayuntamientos los que pueden movilizar suelo para hacer vivienda pública.

Feijóo ha empleado sus quince minutos de réplica para intentar desmontar el discurso triunfalista del presidente del Gobierno y estirar el chicle de la ley del 'sólo sí es sí' cuya reforma se aprueba definitivamente mañana en el Senado. Finalmente le ha pedido que dimita y convoque ya elecciones "si tan bien va España como dice", le espetaba con retranca. "Es urgente derogar el sanchismo", clamaba después marcando así su particular hoja de ruta. Un mensaje que ha reiterado en su segundo turno de intervención. "Si España quiere cambio derogaremos el sanchismo", atornillaba en lo que sonaba a lema electoral..

El dirigente popular ha acusado a Sánchez de vivir de la deuda y del déficit "soltando dinero por las calles", de una recaudación récord con los impuestos y de "empobrecer a las rentas medias y bajas" mientras le echaba en cara los precios de la cesta de la compra y la perdida de poder adquisitivo de los españoles mientras se niega a deflactar el IRPF.

A continuación ha intentado zafarse de la agenda que ha tratado de imponer Pedro Sánchez con Doñana y la vivienda para colar el ‘sólo sí es sí’, talón de Aquiles de Sánchez y al que ha vuelto a responsabilizar de la rebaja de penas de un millar de agresores sexuales, violadores y pederastas. Feijóo ha reclamado una vez más ceses y a subrayar las divisiones internas que han partido al Gobierno en "tres fracciones. Podemos uno y Podemos dos".

"Es el colmo. O cesa a alguien de una vez o váyase", exigía mientras afeaba al presidente del Gobierno que se ausentara la semana pasada en la votación de la reforma de la norma de Irene Montero para marcharse a Doñana.

Antes de entrar al hemiciclo a batirse el cobre con el presidente del Gobierno, el líder de los populares ya daba por descontado que Sánchez mordería con Doñana. Ya traía preparada la respuesta después de leer a un veterano socialista como Alfonso Guerra que hoy cargaba contra Sánchez por hacer de Doñana terreno electoral.

"No use Doñana como un disparadero electoral. No lo digo yo. Lo ha dicho Alfonso Guerra", le espetaba cerrando filas una vez más con su barón más poderoso, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. Después ha culpado al jefe del Ejecutivo de la situación agónica de Doñana y de los cultivos en el resto de España. "El cambio climático es la primera razón. La segunda es su desidia", zanjaba.

En su segundo turno de réplica a Sánchez el líder popular aseguraba que el proceso abierto en Bruselas al reino de España por Doñana fue consecuencia de las actuaciones del PSOE en Andalucía bajo el Gobierno de Susana Díaz y que las primeras multas por la situación del Parque Natural se han producido en 2022 con Sánchez ya en La Moncloa. Una afirmación que ha negado el jefe del Ejecutivo.