Joan Laporta, presidente del Fútbol Club Barcelona, comparece hoy para dar cuenta, por primera vez de forma oficial, por el ‘caso Negreira’ y la investigación sobre una presunta trama de corrupción por pagos de la entidad al expresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), José María Enriquez Negreira.
El caso ha puesto al FC Barcelona en el disparadero. Sobre la mesa está la sospecha de una posible compra de árbitros por parte del club catalán para verse beneficiado en la competición, un escándalo que desde la entidad han negado tajantemente, apuntando reiteradamente a una campaña contra el club y su historia.
Con una máxima expectación y un mes después de que el Juzgado de Instrucción 1 de Barcelona admitiese a trámite la denuncia de la Fiscalía y la querella del árbitro Xavier Estrada Fernández, que originó la causa judicial, será a partir de las 11:00 cuando comparezca Laporta en el Camp Nou.
Tendrá que responder por los presuntos delitos continuados de corrupción entre particulares en el ámbito deportivo, administración desleal y falsedad en documento mercantil, por los que la jueza ha abierto la causa judicial. En ella están investigados, además de Negreira, el FC Barcelona como persona jurídica y sus expresidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu. También, como persona jurídica, la empresa de Negreira DASNIL 95 SL y los exdirectivos blaugranas Óscar Grau y Albert Soler.
La querella que originó la causa que ha puesto al FC Barcelona en el punto de mira sostiene que, entre 2016 y 2018, Negreira cobró nada más y nada menos que 1.392.680 euros del club catalán través de su empresa Dasnil 95 SL.
Además, la Fiscalía sospecha que de 2001 a 2018 Negreira cobró del Barça más de 7,3 millones de euros a través de sus empresas, a cambio de "actuaciones tendentes a favorecer al FCB en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club, y así en los resultados de las competiciones"; algo grave y flagrante para la competición, de confirmarse así.
Tal es la situación que, para investigar todo esto, la jueza ha encargado a la Guardia Civil determinar el motivo de los pagos del Barça y el destino de esos pagos.
En este escenario, la Fiscalía cree que, a través de Sandro Rosell y Josep María Bartomeu como presidentes, el FC Barcelona "mantuvo un acuerdo verbal estrictamente confidencial" con Negreira, que entonces era vicepresidente del Comité Arbitral, para que les favoreciera en decisiones arbitrales.
Fue en mayo de 2018 cuando Negreira fue relevado del Comité Técnico de Árbitros, momento en que el Barça dejó de pagarle, lo que este recriminó a Bartomeu en un burofax que la fiscal reprodujo así en la denuncia: "No tengo voluntad de dar publicidad a todas las irregularidades que he conocido y vivido de primera mano en relación con nadie del club, pero usted me obligará a ello si no reconsidera su decisión y cumple con el acuerdo que teníamos de seguir contando con mis servicios hasta fin de mandato presidencial".
Ahora, desde que el caso saliese a la luz el pasado 15 de febrero y tras la investigación realizada también por el propio club, Joan Laporta comparece para dar cuentas en medio de la tormenta deportiva y mediática que afecta al club.
Aunque hasta ahora, y desde el 21 de febrero, no se pronunciaba de forma oficial e institucional, su última referencia al caso la realizaba este domingo Madrid, donde su equipo empataría por 0-0 contra el Getafe.
“A nosotros no nos gusta ganar con favoritismo arbitral”, dijo, a lo que añadiría también otras declaraciones tras ser preguntado por el caso: “Hay otro club que se ha presentado en el juicio, este que históricamente ha sido favorecido", dijo, refiriéndose sin nombrarlo al Real Madrid, que el pasado 12 de marzo anunciaba que se personaría en el procedimiento judicial.