Después de Santiago Carrillo y Dolores Ibarruri 'La Pasionaria', Ramón Tamames era uno de los líderes del PCE (Partido Comunista de España) más conocidos durante la Transición. Ahora negocia con Vox para ser el candidato a una posible moción de censura a Pedro Sánchez.
La evolución ideológica de economista de reconocido prestigio y de 89 años de edad es pública. Del PCE de Carrillo terminó en las filas del CDS (Centro Democrático y Social) fundado por Adolfo Suárez, previo paso por Izquierda Unida, formación que ayudó a formar y en la que solo estuvo un año.
Ahora está en conversaciones con Vox, para liderar la moción de censura contra Pedro Sánchez, tal y como ha desvelado el propio Santiago Abascal en redes sociales.
De muy izquierda a muy derecha. Ese ha sido su recorrido. Ramón Tamames (Madrid, 1933) fue uno de los líderes juveniles del antifranquismo a raíz de los disturbios universitarios de 1956. Aquel año fue detenido junto a otros estudiantes como Javier Pradera o Fernando Sánchez Dragó como responsables de las movilizaciones contra el régimen que acabaron con un joven falangista muerto.
Aquellas movilizaciones del 56 fueron la semilla de la posterior Transición democrática. Muchos de los detenidos pertenecían a las familas de los vencedores de la Guerra Civil. "Cuando la nota policial de nuestra detenciones apareció en la prensa, resultó llamativo que nuestros nombres fueran precedidos por un 'don', un tratamiento que no solía aplicarse a otros opositores detenidos por el régimen", recordaba años después.
Tamames se convirtió en profesor de la facultad de Económicas primero en Málaga y luego en la Universidad Autónoma de Madrid. Fue autor de uno de los manuales más leídos y temidos por los estudiantes de Económicas. Titulado "Estructura económica de España', más conocido como "El Tamames".
El PCE lo presentó como candidato a la alcaldía de Madrid en 1979. El acuerdo entre socialistas y comunistas permitió a la izquierda volver a gobernar los ayuntamientos por primera vez desde la II República. En Madrid, Enrique Tierno Galván llegó a la alcaldía y Tamames fue su número dos.
Galardonado con varios premios, entre ellos el Premio Nacional de Economía y Medio Ambiente en 2003. Tamames es autor de varios libros recientes, el último sobre Hernán Cortés llamado "La mitad del mundo que fue de España. Una historia verdadera, casi increíble". Un libro que curiosamente está prologado por Josep Borrel, el actual jefe de la diplomacia europea.
Es sus últimas entrevistas en la promoción del libro, la pasada primavera, no dudó en salir en defensa de Vox. " Vox es un partido constitucional, algo que no son muchos de los partidos que apoyan al Gobierno, que proceden de la violencia terrorista, que están fuera del sistema. Vox está dentro del sistema. ¿Que no le gustan las autonomías? ¡Toma! Y es cierto que hay que coordinar mejor las autonomías. Vox se va autorregulando", dijo en una entrevista a El Mundo.
En ella también admitió que conocía a Iván Espinosa de los Monteros y a Santiago Abascal, de quien elogió su etapa en los años duros del PP en Esukadi. "Tampoco tienen que rechazarlo tanto los del PP, si ha estado con ellos mucho tiempo al frente del País Vasco en un momento muy duro para todos. Habrá que darle las gracias también por aquella época", reflexionaba en esa entrevista.
El padre de Ramón Tamames era médico. Republicano y "notabilísimo cirujano", Manuel Tamames, como le calificaba ABC, era el doctor personal del torero Luis Miguel Dominguín, el padre de Miguel Bosé. Era la época de sus escarceos con Ava Gadner. La amistad entre médico y torero fue tal que el padre de Ramón Tamames fue el padrino de bautismo de su hija Lucía Dominguín Bosé.
Incluso se cuenta que su relación era tan estrecha que cuando Manolete sufrió la cogida que le llevaría a la muerte, alternaba con Gitanillo de Triana y Luis Miguel Dominguín, quien llamó al doctor Tamames para que se presentara inmediatamente en Linares. Pero no logró salvarle.
Ahora su hijo Ramón, a los 89 años, se ve tentado por Vox para volver al ruedo de la política y a sus cornadas después de una larga trayectoria de un extremo al otro del arco ideológico.