El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, confesaba a la salida de su tenso e intenso sexto cara a cara con Pedro Sánchez haber "disfrutado". Para los populares la intervención “feroz” del presidente Pedro Sánchez contra su jefe les parece “reveladora” de la "debilidad" y del estado de nervios en el que se encuentra sumido el Gobierno con unas encuestas que presumen “deben de ser mucho peores” de lo que dicen en Moncloa. Hasta el ‘novato’ Borja Sémper reconocía por los pasillos del Senado lo mucho que le había sorprendido lo “fuerte” que había salido Sánchez contra Feijóo. “La ley del ‘sólo sí es sí’ les está haciendo mucho daño cuantitativa y cualitativamente. El desgaste político es real”, señalaba.
El líder de los populares no ha desaprovechado la oportunidad y Feijóo ha ido a degüello blandiendo la norma estrella del ministerio de Igualdad contra Pedro Sánchez. "Es que han confirmado que excarcelaron a violadores a sabiendas", explicaban sus colaboradores más estrechos después de que la exvicepresidenta Carmen Calvo reconociera en una tertulia en la cadena SER que ella advirtió en el seno del Consejo de Ministros de lo podría pasar si se aprobaba la ley tal cual. Unas revelaciones que fuentes del más alto nivel del PP consideran deja al descubierto al Gobierno.
La estrategia de Génova pasa desde hace días por desmontar el "feminismo" de Sánchez para intentar pescar voto entre las mujeres. Una asignatura que tienen pendiente en el PP y en la que les sigue el PSOE. “Todos los Gobiernos de España sin excepción han supuesto avances para la mujer. Usted pasará a la historia por ser el primero en dar un paso atrás en la justa lucha del feminismo clásico de España", atornillaba Feijóo en el Senado golpeando el flanco más débil del Ejecutivo.
Los populares daban por descontado que el presidente del Gobierno volvería a insultar al líder del PP en este nuevo duelo en el ambos líderes se intentan coger la medida. Aseguran que en eso Sánchez siempre les va a ganar pero que enfrente se ha encontrado la oposición "contundente" de Feijóo sin necesidad de bajar al barro. "Es que ha tenido tirar de Matas, Rato y Zaplana. Ministros de hace 19 años. De Ayuso, Casado y Vox para intentar sacar del foco la ley del sólo sí es sí", analizaban en ese clásico que es el postdebate.
Una muestra más dicen de la actual "debilidad" de Sánchez al que le recriminan tener la piel muy fina y tomarse muy a mal las críticas cuando son contra él. "Mandan a 22 ministros a insultar a Feijóo y cuando le rozas un poco Sánchez se queja", ironizan desde la cúpula popular mientras se quejan de que su jefe ha planteado cuatro preguntas al presidente y "como siempre" no ha contestado "ni una". Ni sobre la ley del 'sólo sí es sí', ni sobre el pacto de rentas, ni sobre el envío de tanques a Ucrania ni tampoco a su requerimiento de abrir un canal de comunicación estable entre ambos para informarle de las líneas que presidirán la presidencia española.
En Génova no van a dejar pasar ni un sólo día sin exprimir al máximo el pulso que se vive en el seno del Gobierno. La ley del 'sólo sí es sí' ha tensado una vez más las costuras de la coalición y amenazan posible reventón. Los populares buscarán ahondar en esa división echando mano de otras cuestiones en las que el PSOE y Podemos mantienen una distancia sideral.
En este sentido en las próximas semanas forzarán una votación en el Congreso de los Diputados sobre el envío de tanques Leopard a Ucrania. Eso les proporcionará otra foto más de las profundas diferencias que asedian al Ejecutivo esta vez por la decisión de Sánchez de involucrarse más en la guerra en contra de la opinión de Podemos.
Eso mientras Feijóo ofrece sus votos a Pedro Sánchez para cambiar de forma inmediata la ley del 'sólo sí es sí' y para apoyar el envío de material militar a Ucrania. Una mano tendida que reforzará su posición en el centro político y su perfil presidenciable de hombre de Estado en un año electoral clave. Todo son ventajas.