El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha reunido como todos los lunes a su Comité de Dirección. Los populares intentan establecer un cortafuegos que les aísle de la polémica surgida con el protocolo sobre el aborto en Castilla y León. Un asunto que puede afectar a su estrategia de ocupar el centro y convencer al casi millón de votantes socialistas de que elijan ahora la papeleta del Partido Popular.
Su portavoz de campaña, Borja Sémper, ha esperado para hacer la valoración oficial del partido sobre este asunto que se produjera la declaración institucional del presidente de Castilla y León. Alfonso Fernández Mañueco desde Valladolid ha asegurado que "no se obligará ni a los médicos ni a las mujeres a nada" en contra de lo que sigue sosteniendo su vicepresidente Juan García-Gallardo. A continuación en Génova se han descolgado con que no existe ningún protocolo sobre el aborto a pesar de que desde la consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León llevan cinco días asegurando que ese nuevo protocolo para disminuir el número de abortos en Castilla y León se aplicaría desde este lunes.
"En ningún caso en Castilla y León se va a actualizar el protocolo que está vigente y el criterio médico es lo que se va a aplicar", ha insistido el portavoz para después cargar contra Vox.
"Vox acude al rescate mediático de Sánchez, es un chollo para el Gobierno de Sánchez y Podemos", ha dicho Sémper. Muy duro ha acusado a la formación de Santiago Abascal de hacerle un favor al Gobierno de coalición acudiendo de su "rescate mediático" y desviando el foco de la ley del 'sólo sí es sí' utilizando a las mujeres y ha tachado la iniciativa de Vox de "insensible".
"Nunca se debería de haber producido. Es una polémica artificial sólo positiva para Vox y para Sánchez. Utilizar algo tan sensible para obtener rentabilidad electoral es algo que no compartimos", ha sentenciado.
Mientras su portavoz se empleaba a fondo en apagar el incendio, Feijóo sigue sin pronunciarse públicamente sobre un debate que es 'criptonita' para los populares. En Génova le excusan con el argumento de que Feijóo no puede dedicarse a ser "comentarista" de lo que dicen los vicepresidentes autonómicos de otros partidos.
Lo más que ha llegado a decir el líder del PP fue este fin de semana cuando se comprometió a que su partido "no se dejará someter a las minorías que nos circunvalan", en referencia a Vox pero sin mencionarles expresamente.