Génova asiste con el bol de palomitas a la autodestrucción de Ciudadanos. Un regalo anticipado por Navidad que piensan cobrarse en las elecciones de mayo. El PP de Alberto Núñez Feijóo aspira a engullir de un solo bocado el trozo pastel naranja sin compartirlo con nadie, salvo que la fórmula para hacerlo es muy distinta de la OPA hostil que puso en marcha la anterior dirección de Pablo Casado.

La maniobra de entonces pasaba por reclutar en masa a dirigentes de Ciudadanos -en la era Casado se llegó a fichar hasta 200 altos cargos de la formación de Arrimadas- pero esa pantalla ya está superada. Desde el entorno de Feijóo se insiste en que no se ha puesto en marcha ninguna ‘operación Ciudadanos’ aprovechando la guerra fratricida entre Inés Arrimadas y su lugarteniente Edmundo Bal para hacerse con los despojos del partido naranja.

“No hay una operación global en marcha de ningún tipo. Ni adhesión de las siglas ni de fichajes de sus cuadros. La anexión que queríamos ya la hemos conseguido y esa es la de su electorado”, aseguran a NIUS desde el núcleo duro de Feijóo mientras esgrimen encuestas que reflejan que el PP es el partido que más voto recoge del naufragio de la formación de Arrimadas.

El presidente de los populares certificaba este miércoles en una entrevista en Onda Cero que el proyecto ideológico de Ciudadanos “ya está subsumido” en la marca de la gaviota y “tiene cabida en el PP actual”. El objetivo que se han marcado en Génova pasa por persuadir a los pocos votantes que les quedan de que el Partido Popular es “el que mejor defiende el legado político” y “los valores fundacionales” de Ciudadanos.

“En ese partido creo que hay personas que son aprovechables para la política. No tengo inconveniente en hablar con ellas y valorar si hay alguna posibilidad de coincidir siempre dentro del máximo respeto”, dejaba caer el gallego en esa misma entrevista. ¿Significa eso que Feijóo ha dejado la puerta abierta a fichar el “talento” de Begoña Villacís para hacer ‘ticket electoral’ con Almeida en Madrid o de la propia Arrimadas?

Desde la dirección del Partido Popular niegan que se haya hecho oferta alguna a Villacís o a Arrimadas para que se pasen a sus filas. “No es una propuesta que esté encima de la mesa. Siempre han dicho que no quieren saber nada del PP. Ellas mismas se han encargado de cerrar la puerta a cualquier movimiento que vaya en esa dirección”, recuerdan para a continuación añadir que si quieren reconsiderar su posición “la dirección del PP está en Google”.

En el caso de la vicealcaldesa Begoña Viilacís admiten que sí podría entrar dentro de la categoría de “talento” rescatable de Ciudadanos. “¿Personas como Begoña Villacís entra como lo que consideramos talento de Ciudadanos? Puede ser. Habría ver con quién y para qué”, reconocen en Génova. Eso sí, subrayan que esa decisión depende de lo que quiera el partido en Madrid. Feijóo ha dado manos libres a Isabel Díaz Ayuso (igual que al resto de barones autonómicos) para confeccionar las listas a la comunidad y a los ayuntamientos y desde la dirección regional ese fichaje no está, al menos de momento, en su radar.

“Por nuestro lado nada en marcha”, confirma a NIUS uno de los hombres fuertes de Ayuso en el PP de Madrid.

En unas elecciones, las de mayo, en las que muchas comunidades y capitales de provincia se decidirán por un puñado de votos, los restos de Ciudadanos pueden ser clave para inclinar la balanza del lado del PSOE o del PP.

En Génova calculan que la batalla fratricida entre Edmundo Bal e Inés Arrimadas “va contra ellos mismos” y no hace más que “achicar” aún más el espacio naranja en favor suyo lo que en el caso de Madrid tendría una traducción directa a favor de los intereses del alcalde José Luis Martínez-Almeida.

“Ese resto no conseguiría representación en ningún territorio y puede que con estos problemas internos incluso se achique. Almeida está a dos o tres concejales de la mayoría absoluta. Va a tener más concejales que toda la izquierda junta”, insisten los populares. Un escenario que de cumplirse haría repetir como alcalde a Almeida aunque no consiguiera mayoría absoluta.

En cualquier caso, el Partido Popular apelará al voto útil entre los socialistas desencantados con Pedro Sánchez (aspiran a sumar por ahí medio millón de votos) y por descontado entre el 2,5% que el último CIS da todavía a Ciudadanos. Eso mientras intenta instalar la idea entre el electorado de ha cambiado el ciclo político. A ello ya se ha puesto Feijóo convencido de que España, cuando llegue el momento, emitirá un voto “muy pragmático” a la hora de decidir entre “Sánchez y los independentistas o el PP”.

“Ciudadanos no es previsible. No son confiables. Nosotros somos un partido de centro derecha que colinda a la izquierda con el PSOE y a la derecha con Vox. Entremedias no hay nada”, concluyen los fontaneros del Alberto Núñez Feijóo.