La celebración de la Cumbre de la OTAN en Madrid ha movilizado, además de a un gran dispositivo de seguridad, a numerosos medios de comunicación de todas partes del mundo. Cerca de 2 000 periodistas están acreditados para seguir durante la semana el cónclave que decidirá el rumbo de la Alianza Atlántica durante la próxima década.
Contigua a la sala en la que se ubica el Consejo Atlántico, donde se reunirán los líderes, se ha construido un gran centro internacional de prensa de 14 000 metros cuadrados para entre 1 200 y 1 500 profesionales de los medios de comunicación.
Estará abierto 24 horas y, además de una sala central con puestos de trabajo, alberga hasta 13 salas para ruedas de prensa, una de ellas la central con capacidad para 350 personas. En ellas será en las que comparezcan todos los presidentes y primeros ministros el jueves, una vez finalice la Cumbre, para dar cuenta de los logros cosechados.
Ifema y sus alrededores están blindados durante esta semana por motivos de seguridad y para llegar hasta allí los periodistas solo pueden acceder a través de autobuses lanzadera habilitados por los organizadores.
Salen desde un centro de acreditaciones instalado en Mar de Cristal, en Hortaleza, donde los periodistas antes deben haber pasado varios controles de seguridad por parte de la Policía Nacional. Junto a su acreditación, reciben como obsequio de la OTAN una 'tote bag', un cuaderno y un bolígrafo.
Una vez en Ifema, el comedor del centro de prensa ofrece una carta en la que los cafés cuestan 2,90 euros, tres euros la bollería y entre siete y ocho euros los bocadillos, sandwiches o las ensaladas.
Si se opta por un menú completo el precio es de 20,35 euros, pero si se eligen platos sueltos se debe pagar por el salmorejo 7,70 euros y 8 euros por una ensaladilla rusa. El estofado del día o un pescado en salsa son 15 euros y 2,35 la pieza de fruta.