La cumbre de la OTAN dejará a Madrid blindada los próximos 29 y 30 de junio. La operación Eirene garantizará la máxima seguridad del importante cita internacional a la que asistirán 40 importantes líderes mundiales con un despliegue de 10.000 efectivos, el mayor que se ha hecho en Democracia, según fuentes del Ministerio del Interior..
La operación Eirene comenzó a organizarse en octubre el año pasado, cuando parecía remota la invasión de Rusia a Ucrania y el conflicto bélico que mantiene en vilo a toda Europa. Ahora con más razón la seguridad juega un importante papel para garantizar que los encuentros se realicen en el ambiente más tranquilo por lo que se desplegarán 6.550 policías nacionales, 2.400 guardias civiles y efectivos de la policía municipal, de bomberos y de protección civil de la Comunidad de Madrid; también se incorporan el personal de la seguridad de la Casa Real, de la Presidencia del Gobierno y seguridad privada, así cmo la de los propios agentes de seguridad de cada delegación y los de la propia OTAN.
La presencia del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, es todavía una incógnita, por lo que no se sabee si acudirá presencialmente a la cumbre de la OTAN o intervendrá por videoconferencia. Este es uno de los "flecos" de la operación Eirene que, tendrá previsto su llegada por si así ocurre.
La protección de la delegación estadounidense, con el presidente Joe Biden, exigirá más de 1.000 personas y ocuparán tres hoteles de Madrid y en total serán 5.000 personas que participarán en la cumbre de la OTAN.
En total acudirán 40 delegaciones: los 30 miembros de la OTAN y los cuatro países asociados de Asia-Pacífico (Australia, Nueva Zelanda, Japón y Corea del Sur) y los países miembros de la Unión Europea pero que no forman parte de la Alianza. Participarán también Suecia y Finlandia, países que han solicitado ingresar en el bloque occidental
Las sesiones de la cumbre se realizaran en las salas del recinto ferial Ifema, una zona que estará especialmente vigilada. Todo se está "peinando" para que nada altere la importante cita que tendrá lugar los días 29 y 30 de este mes.
El Gobierno ha hecho una llamamiento a los madrileños para usen durante esos días el transporte público y a las empresas, sobre todo a las ubicadas en las zonas "calientes", para que faciliten a sus empleados el teletrabajo.
Madrid en pleno "notará" los efectos de la cumbre, pero serán Ifema y el Museo del Prado, que cerrará dos días, las zonas más afectadas. También se prevé afectacione en el tráfico en las zonas del Palacio Real, el Teatro Real y del Museo Reina Sofía, el eje del Paseo de la Castellana (por los hoteles donde se alojarán muchas delegaciones) y las del aeropuerto de Barajas y la Base Aérea de Torrejón.
Fuera de Madrid, el Real Sitio de San Ildefonso y la Real Fábrica de Cristales de La Granja, en Segovia, también estarán afectados porque los participantes realizarán una visita a estos sitios de importancia histórica.