Al calor del fin de semana se van a sumar durante los próximos días las tormentas en España. Algunas será secas (con el consecuente riesgo de incendios en zonas con mucho calor y viento intenso), y otras serán con precipitaciones. Las segundas son más probables en el norte y el este, aunque no se descartan en zonas del interior y del sur, sobre todo áreas de montaña. En algunos puntos podrán ser con barro por la presencia de polvo sahariano. Este es el tiempo con el que despediremos agosto la semana que viene.
La semana del 23 al 29 de agosto empieza con cierta inestabilidad en amplias zonas del este, sur y centro peninsulares, con nubosidad media, alta y de evolución y, dentro de un margen de incertidumbre, con posibles chubascos y tormentas ocasionales en áreas de montaña, siendo más probables en las partes orientales del Pirineo y del sistema Ibérico, según el pronóstico provisional de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
No se descarta alguna tormenta seca aislada en zonas llanas, así como alguna precipitación débil y dispersa en el Cantábrico, golfo de Valencia, Estrecho, Melilla y norte de Canarias. La posibilidad de polvo en suspensión en el sureste peninsular hace que algunas precipitaciones puedan ir acompañadas de barro.
A partir del jueves la inestabilidad quedará reducida al Cantábrico, con posibilidad de lluvias débiles, y otras zonas de los tercios norte y este de la Península, con algunos chubascos y tormentas en montaña, más probables en el Pirineo y sistema Ibérico oriental.
No se prevén grandes cambios en las temperaturas, que mantendrán valores normales o ligeramente superiores, pudiendo alcanzar los 36 grados en el sur de la vertiente atlántica, prevé la Aemet.
El lunes y el martes soplarán intervalos de viento fuerte, del nordeste en el litoral gallego, de levante en el Estrecho, así como alisio en Canarias.