El año está a punto de terminar y lo va a hacer con temperaturas "anormalmente templadas" en prácticamente toda España, como ha avanzado Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), con valores diurnos que serán casi primaverales. La llegada de un anticiclón africano va a traer días de sol y cerrará la puerta a las borrascas que han causado lluvias la semana de Nochebuena y Navidad.
En gran parte de España, y sobre todo los días 30 y 31 de diciembre (Nochevieja) y 1 de enero (Año Nuevo), "los valores serán primaverales más propios de últimos de abril e incluso en algunas zonas de principios de mayo", ha precisado Del Campo.
A lo largo de esta semana se irán imponiendo las altas presiones asociadas a una masa de aire subtropical, "lo que garantizará unos días de fin y comienzo de año sin lluvias y temperaturas más altas", que se situarán entre 5 y 10 grados por encima de lo habitual, e incluso 15 grados, en extensas áreas del país.
Esta situación anticiclónica y con altas temperaturas favorecerá además la inversión térmica y los bancos de niebla persistentes en el interior peninsular y en las cuencas de los grandes ríos, dejando un ambiente más frío y el empeoramiento de la calidad de aire por la ausencia de viento que impide la dispersión de los contaminantes.
El último día del año dominará el tiempo estable con "ausencia de lluvias en prácticamente todo el país" y con nieblas en las cuencas del Duero y Ebro y con temperaturas muy templadas en las horas centrales del medio día -hasta 15 grados más de lo normal en amplias zonas- y, por el contrario, un ambiente más fresco en zonas de nieblas.
La madrugada del 31 de diciembre al 1 de enero se caracterizará por no ser especialmente fría, sin apenas heladas y por máximas que se situarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal según vaya avanzando el día, ha concluido Del Campo.