{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
La falta de precipitaciones en España en la época supuestamente más lluviosa del año está repercutiendo muy negativamente en nuestra reserva hídrica. Los embalses se encuentran 15 puntos por debajo de la media de la última década, y varias cuencas están ya al límite, principalmente las de Guadalquivir y el Guadiana. ¿Qué restricciones se están contemplando para hacer frente a la sequía?
Una semana más, las reservas de agua caen en España, y nuestros embalses están ya a tan solo el 44,77 por ciento de su capacidad. Las precipitaciones escasean desde el inicio del año hidrológico (1 de octubre de 2021), con un 36 % menos de lluvia de lo habitual para estas fechas (promedio de 1981-2010). Una situación que no tiene pinta de estar llegando a su fin.
La sequía meteorológica se prolongará al menos a medio plazo, a lo largo del mes de febrero, ha comunicado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), y hay un 50 % de probabilidad de que se alargue durante el trimestre febrero-marzo-abril, frente a un 30 % de probabilidad de que las precipitaciones se encuentren en los valores habituales, y un 20 % de probabilidad de que el trimestre sea “húmedo”.
Así, es bastante probable que el invierno 2022 termine con carácter seco e incluso muy seco en gran parte de España. Aunque en varios puntos del mapa hidrológico la cosa se está poniendo muy fea a comienzos de febrero.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha advertido de que se van a aumentar las restricciones para la campaña de riego. Estas limitaciones ya se vieron incrementadas en 2021 ante la escasez de lluvias y volverán a hacerlo este año debido a que ha comenzado "peor" incluso que el anterior, y que la situación de sequía es "preocupante".
Así lo informaba la pasada semana el presidente de la CHG, Joaquín Páez, quien indicó que se está trabajando de cara al próximo 15 de febrero para abordar la primera Comisión de Desembalse de 2022 y hacer la planificación para la campaña de riego "que va a ser complicada".
"El año pasado hubo reducciones de hasta un 50% y podrían verse incrementadas estas restricciones si no aparecen precipitaciones porque estamos peor”, dijo.
Páez calificó de "preocupante" la situación que vive actualmente la Cuenca del Guadalquivir en este inicio de año hidrológico porque está siendo "especialmente seco", "un 30% más desde el 1 de octubre que la media de los últimos 25 años".
Preguntado por las medidas que se están tomando, el portavoz de la CHG decía que "ya se han coordinado" con todos los sistemas de abastecimiento para que "den garantía a los ciudadanos". "Hemos reservado 400 hectómetros cúbicos para que el abastecimiento siga como hasta ahora y está garantizado de dos a tres años. Además, hemos propuesto una serie de obras de emergencia, todas de cara a garantizar el abastecimiento", declaró.
La situación de sequía prolongada también está afectando de manera excepcional a Extremadura, en especial en los embalses de la cuenca del Guadiana. Cinco presas de esta cuenca están en situación de emergencia y cuatro en alerta por escasez de agua, según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico recogidos por Europa Press.
El Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico ha señalado en el informe que "se están aplicando las medidas establecidas para los correspondientes escenarios en el Plan Especial de Sequías".
En cualquier caso, ha apuntado que la situación actual y las previsiones más relevantes para los próximos meses indican que, respecto al abastecimiento, "se deberá continuar movilizando recursos desde Torre de Abraham a Gasset y desde Los Molinos a Llerena", así como desde los pozos de emergencia habilitados por algunos de los ayuntamientos del Consorcio de Campo de Calatrava para garantizar el abastecimiento de los municipios del Consorcio (Embalse de La Vega del Jabalón) y continuar con las acciones de investigación y habilitación de nuevas fuentes de recurso.
Además, ha insistido en que la situación en el embalse de Tentudía, en escenario de "Emergencia", hace necesaria la "puesta en marcha de pozos de sequía que apoyen el suministro a esta mancomunidad".
Por otro lado, en relación al regadío, el Ministerio ha informado de que la situación general de las reservas en los embalses "es muy negativa, por lo que se prevé que será necesario restringir los consumos de riego desde la mayor parte de los embalses de la cuenca".
En la Zona Oriental, ha apuntado, "será preciso establecer restricciones en las zonas regables del Vicario, Torre de Abraham y Gasset si no se producen aportaciones importantes en los próximos meses".
La sequía meteorológica está afectando a prácticamente todo nuestro territorio, salvándose únicamente algunas regiones del norte peninsular y las islas Baleares.
Algunos pantanos se están vaciando a un ritmo excepcional. Un ejemplo es el embalse de La Baells, en Bergadá, Barcelona, que hace un año estaba al 87% de su capacidad, y hoy está a solo el 56%. La escasez de lluvias y nieve en Cataluña está provocando que los embalses se encuentren en sus niveles más bajos desde 2019.