Calor histórico en el Mediterráneo oriental: se alcanzan los 45ºC en mayo

  • Los incendios se han disparado durante el fin de semana en Chipre e Israel a causa del calor extremo

  • En algunas zonas se levanta le obligación de llevar mascarilla en colegios hasta que el calor vaya a menos

  • Las autoridades advierten del riesgo de dejar desinfectante en el coche porque puede ser inflamable

El calor aprieta a esta hora en Grecia, Turquía, Chipre, Israel… Se han superado los 42ºC, que en algunas zonas son un récord para el mes de mayo. Sería demasiado incluso para pleno verano en el Mediterráneo oriental. Pero ¿a qué se debe este episodio tan extremo?

Hay quien habla incluso de la primera ola de calor de 2020 en estos países dado que van varios días con temperaturas extremas y aún quedan unos cuantos.

Hasta 45ºC en Israel y Jordania

En zonas de estos países el Ministerio de Agricultura ha tenido que prestar ayuda en el campo para que las cosechas no se echasen a perder, e incluso se está advirtiendo del riesgo de dejar los geles desinfectantes de manos en el coche dado que pueden ser inflamables a tan altas temperaturas. También se ha relajado la obligación de llevar mascarilla en Israel en los colegios ya que con el sudor puede resultar asfixiante.

En Tiberíades, en el distrito norte de Israel, se han alcanzado los 45ºC de temperatura máxima durante las horas centrales, y en Áqaba (Jordania, junto al Mar Rojo), se ha rozado esta marca y se ha sufrido una tormenta de arena seguida de una tormenta eléctrica fruto del calor. Se trata de una situación histórica porque se da antes de verano y por su duración: se calcula que unos seis días con valores extremos.

En Chipre, por su parte, los 42,5 grados registrados en Paphos pasan a la historia como la temperatura más elevada alcanzada nunca en la isla un mes de mayo.

Así estaban este fin de semana las playas de Tel Aviv, Israel, y las playas próximas a Atenas, Grecia, que acaban de reabrir:

¿A qué viene tanto calor?

Podemos resumir los motivos del episodio extremo de calor en cuatro puntos principales.

Por un lado, la dorsal anticiclónica que ha estado bloqueado el paso de bajas presiones, despejando los cielos y permitiendo que el sol caliente durante las aproximadamente 14 horas que dura el día (prácticamente 15 en el caso de Nicosia, por ejemplo).

En segundo lugar, una masa de aire muy, muy cálido procedente de África se ha adentrado en el Mediterráneo oriental, con temperaturas que, a unos 850 hPa (alrededor de 1.500 metros de altura), son hasta 14ºC más elevadas de lo habitual para la época del año (promedio del periodo de referencia 1981-2010).

Esto ha dado lugar, a un mayor calentamiento de la superficie del Mediterráneo es esta zona, que se encuentra al menos 2ºC más caldeado de lo que se considera normal a mediados de mayo. Este sería el tercer factor que contribuye a la supuesta ola de calor, y que no es más que una manifestación más de una problemática que arrastra el Mar Mediterráneo desde hace décadas: el cambio climático. Es una de las zonas cero del mundo, donde la temperatura se dispara a una velocidad mayor que en la mayoría de las aguas del mundo.

Por último, hay que tener en consideración el papel que juega el efecto Foehn del viento. El viento se encuentra con una montaña o cordillera y se ve obligado a ascender. Lo que ocurre cuando desciende es que se comprime y calienta, y llega a las zonas de sotavento mucho más ‘secante’.

Incendios durante el fin de semana

La conjunción de estos factores ha disparado el termómetro y, como resultado, los incendios forestales. En Israel una veintena de hogares han sido desalojados este fin de semana, y en Chipre el humo llegaba a prácticamente todos los rincones de la isla después de que se confirmaran al menos seis focos activos.

¿Cuánto terminará el episodio de calor extremo?

El necesario respiro del calor llegará a partir del jueves, cuando una masa de aire frío llegará empujara por una vaguada –elongación de bajas presiones– que se pronunciará sobre la región. Esto dará lugar a un cambio brusco de tiempo, con un descenso pronunciado de las temperaturas y unos chaparrones que en dos días habrán dejado más de 100 litros/m(2) en zonas de Grecia.