Son molestos por el ruido, porque donde hay uno puede haber plaga y porque pican. Los mosquitos en general no nos gustan, pero si al estorbo que suponen habitualmente le sumas que pueden transmitir enfermedades como el zika, apaga y vámonos. Es el caso del tigre y el Aedes japonicus, dos especies que no pertenecen a España pero que se han establecido en los últimos años… Y esta época del año es su preferida.
El mosquito tigre, cuyo nombre científico es Aedes albopictus, se ha asentado en el Mediterráneo y hay zonas donde la preocupación se acentúa por momentos. La provincia más afectada hasta el momento es Castellón. Las lluvias de la primavera y el calorazo que está haciendo desde finales de mayo han convertido a buena parte de la Comunidad Valenciana en un foco de insectos.
Su aspecto es fácilmente reconocible por las rayas blancas que le caracterizan.
No solo el tigre. El marjal también es famoso en las localidades del litoral mediterráneo. Suele reaparecer al final del verano con los temporales que dejan lluvias muy intensas por allí o por estas fechas, al final de la primavera, cuando las tormentas son relativamente frecuentes. Su picadura es todavía más molesta que la del mosquito tigre.
En cuanto al Aedes japonicus, al que todavía no se le ha buscado un apodo más reconocible, se trata de un mosquito que se descubrió en Tokio pero que desde hace más de una década se deja ver por diferentes zonas de Europa. En España, ha elegido principalmente las comunidades de Asturias y Cantabria probablemente porque allí la humedad es una constante.
La plataforma Mosquito Alert, financiada por la Caixa, el Consejo Europeo de Investigación (ERC) y el Ayuntamiento de Barcelona, que hace el seguimiento de las diferentes especies de este insecto en nuestro país ha difundido la siguiente imagen para ayudar a distinguirlos del mosquito común. Aunque es poco habitual que transmitan enfermedades como el dengue y el zika, como suele advertirse por ejemplo en el caso del tigre –el más sonado–, lo mejor es conocer su aspecto y, en caso de picarnos, saber que debemos vigilar nuestro estado de salud para acudir al médico a la mínima.
La plataforma advierte también del mosquito de la fiebre amarilla, el Aedes aegypti, que podría manifestarse en nuestro país este verano porque le gustan las altas temperaturas y la humedad. No sería la primera vez: hace unos años se vieron varios en Fuerteventura.
Su comida preferida es la sangre, necesaria para que las crías puedan desarrollarse bien en los huevos, y tiende a picar varias veces a la misma persona. De nuevo, la preocupación nace de la posibilidad remota pero existente de que este insecto contagie enfermedades letales como el zika, el dengue o el chikungunya.