En los próximos días los termómetros van a experimentar una montaña rusa de temperaturas, oscilando en general en valores normales para la época del año. Por otro lado, las tormentas de los últimos días darán una tregua en prácticamente toda España de manera temporal, con tiempo anticiclónico y estable previsto para los próximos días en general. No obstante, poco a poco una borrasca se irá acercando por el Atlántico y dará lugar a un cambio drástico de las condiciones para despedir el mes de agosto.
Puedes guardar el paraguas por ahora… Pero no lo dejes muy lejos. La segunda mitad de la semana las lluvias se despiden con el regreso de las altas presiones, y las temperaturas van a subir nuevamente.
El viernes volveremos a superar los 34-36 grados, la Comunidad Valenciana y sudeste peninsular, “localmente incluso los 38, en los ríos de mitad sur peninsular y en el valle del Ebro”, pronostica la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
A partir del sábado, los termómetros restarán algunos grados, pero se espera que la semana que viene suban puntualmente, manteniéndose en casi toda España en valores propios de estas fechas (con más de 32 ºC en la mitad sur peninsular, y en torno a 28-30 ºC en la mitad norte).
Entre el domingo y el lunes es probable que “una baja atlántica se aproxime al oeste peninsular, por lo que habrá una tendencia a la inestabilización”, prevé la Aemet.
Las precipitaciones, posiblemente con tormenta, afectarán inicialmente a zonas montañosas del norte y al norte del litoral mediterráneo, extendiéndose a partir del miércoles (con incertidumbre todavía en el pronóstico) a gran parte de la Península, principalmente en la mitad norte, centro y norte de la comunidad Valenciana. “Serán más intensas y persistentes en zonas montañosas del cuadrante noreste, pero probablemente se extenderán también a zonas llanas”, estima por ahora la Aemet.
Si se cumple pronóstico, la primera semana de septiembre será húmeda (con ligeramente más precipitación que el promedio) en la mitad norte de la Península Ibérica, una buena noticia para nuestros embalses. Según la última actualización, el conjunto de la reserva nacional de agua se encuentra a tan solo el 45 % de su capacidad.