Abril está siendo muy cambiante. Si bien hace poco pasábamos la tarde en manga corta, de nuevo esta semana hemos pasado al abrigo y el paraguas en buena parte de España. Para muchos, resulta confuso que estemos a las puertas de mayo y el tiempo siga siendo tan “raro”, pero, ¿qué dicen los meteorólogos? ¿Es inusual lo que está pasando o es normal?
Hace apenas una semana, varias comunidades activaban sus planes de viabilidad invernal por un episodio de nevadas que tiñó de blanco Pamplona o Vitoria, y algunas localidades de Murcia y Andalucía quedaron aisladas por las inundaciones y los desprendimientos, incluso con socavones capaces de tragarse un coche en algunas carreteras.
Se agradeció mucho la tregua del último domingo, día 24, cuando las temperaturas se dispararon y pudieron celebrarse fiestas al aire libre sin riesgo de precipitaciones. Esta semana, en cambio, una borrasca ha puesto fin a la tregua y de nuevo las tormentas vespertinas han tomado el mando.
“Lo primero es reforzar que estamos en primavera y esta es una estación con tiempo muy cambiante”, aclara Rosalía Fernández, meteoróloga de Mediaset. En cuestión de horas, dice, las nubes se desarrollan y acaban “descargando chaparrones tormentosos en muchas zonas preferentemente del interior peninsular”, como venimos observando en los últimos días.
"Podríamos considerar la primavera como la estación del año en la que se producen los cambios de tiempo más bruscos", coincide Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). "La atmósfera se muestra más dinámica y estamos más expuestos a la llegada de masas de aire cálido y frío que se suceden dando lugar a episodios cálidos, casi adelantos veraniegos, que bruscamente son interrumpidos por situaciones lluviosas y de bajas temperaturas, e incluso nevadas, que nos retrotraen al invierno".
En este sentido, es normal que se produzcan estos cambios de tiempo por estas fechas, "aunque es cierto que las nevadas que se produjeron la pasada semana en el entorno del sistema Central fueron inusualmente copiosas para la época", añade Del Campo.
Se dice que “hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo”, algo que claramente habrá que aplicar en los próximos días. Tras el predominio del tiempo inestable en el área pirenaica, montañas de la zona centro, en la Ibérica y en las sierras más orientales de Andalucía, el sol tomará el protagonismo el viernes y se producirá un ascenso casi generalizado de las temperaturas.
Las temperatura subirán, alcanzando valores propios para la época: superaremos los 20 ºC de máxima en la mayor parte del país, "e incluso los 30 ºC en el valle del Guadalquivir y otros puntos de la mitad sur el domingo", señala el portavoz de la Aemet.
*Temperaturas máximas previstas para el viernes, sábado y domingo / AEMET / César Rodríguez Ballesteros
Aunque las nubes no se despedirán del todo. El sábado y el domingo la nubosidad crecerá en zonas montañosas de la mitad norte, con bastante probabilidad de chubascos tormentosos intensos en el Pirineo más oriental, y no se descartan tormentas al sur de la sierra Ibérica, así como en la cordillera Cantábrica más occidental.
La próxima semana comenzará con ambiente más inestable y los chubascos y tormentas serán más frecuentes en el norte, centro y este de la Península, así como en Ibiza, con posibilidad de que sean de nuevo localmente fuertes y con granizo. Las temperaturas bajarán unos 6 a 8 ºC con respecto a las del fin de semana.
A partir del miércoles, aunque todavía hay incertidumbre, es probable que poco a poco la atmósfera se estabilice, cesen los chubascos y suban las temperaturas, informa el meteorólogo. Así, esperamos que la primera semana de mayo llegue por tanto con tiempo plenamente primaveral, en línea con el tiempo que ha caracterizado al mes de abril.