Se avecina una ola de calor en los próximos días y no llega sola: el polvo en suspensión invade ya buena parte del país y va a seguir enturbiando el sequísimo ambiente a medida que avance. Una masa de aire africano va a subir desde el continente vecino y lo va a hacer después de que en el desierto del Sáhara el viento haya levantado muchísima arena y se dirija a nuestras latitudes por advección.
Apenas corre el aire y no hay ni rastro de lluvia, a excepción de Galicia, el Cantábrico y las Islas Canarias. La baja humedad y la estabilidad atmosférica que tendremos en la mayor parte del país esta semana van a potenciar más aún el calor veraniego que va a sofocar con más de 40ºC a algunas provincias, pero además va a hacer que las partículas de arena se queden entre nosotros al menos hasta el jueves. La nube de polvo llega desde Algeria traída por un viento muy seco y muy cálido que no arrastra humedad alguna porque su paso por el mar es muy breve.
Los cielos despejados se tornarán anaranjados o grises sobre todo en la mitad este peninsular y en Baleares, pero también llegará la arena al resto de la península casi en su totalidad, con la excepción del noroeste y la parte más occidental, además del archipiélago canario.
*Imagen: Avance del polvo en suspensión entre el martes y el jueves / Barcelona Dust
Pero no solo nosotros estaremos bajo la influencia del polvo sahariano: se espera que viaje a través del Atlántico y llegue a zonas del Caribe y de México.
La llegada de partículas de arena podría agravar la sequía que arrastramos, ya que roba humedad al suelo donde se deposita, aumentando a su vez la probabilidad de incendios forestales. Además reduce la visibilidad porque enturbia el aire a su llegada, más todavía si, como esta semana, apenas hay presencia de nubes.
En cuanto a sus efectos negativos en la salud, perjudica especialmente a las personas con asma o algún problema respiratorio, porque degrada mucho la calidad del aire. Puede provocar picor de ojos y garganta, conjuntivitis y, en casos de exposición prolongada, bronquitis crónica.
El polvo en suspensión, en cambio, atenúa la altísima radiación solar de estos días, ya que dispersa la radiación y la reduce.