El fin de semana ha sido plenamente primaveral en casi toda España. Hemos tenido tormentas intermitentes y chaparrones que han descargado con mucha fuerza por la irrupción de la profunda borrasca Lola, pero también un repunte de las temperaturas que ha dejado cierta sensación de bochorno en muchas comunidades. Todavía se esperan fenómenos adversos en el comienzo de la semana. Estas serán las zonas más afectadas.
Lola es la séptima borrasca que recibe nombre propio en lo que va de año, y probablemente la menos fría de todas. Principalmente, ha dejado mucha agua (en ocasiones con barro por la presencia de polvo en suspensión) y un espectáculo de rayos y relámpagos que han iluminado el cielo las últimas noches.
En el inicio de esta semana –recta final de abril– la borrasca Lola circulará entre el suroeste de Portugal y el área mediterránea, donde se irá perdiendo a medida que se debilita. No obstante, todavía se espera que agite la atmósfera al menos hasta el miércoles, sobre todo localidades de Andalucía.
Las lluvias volverán a ser generalizadas, afectando a prácticamente todo el país con alguna excepción en el sureste, Baleares y, a partir del martes, Galicia y el Cantábrico occidental, que se librarán de los chaparrones más intensos.
Las mayores acumulaciones se darán en la mitad oeste de Andalucía, Estrecho y el litoral de Málaga hasta la tarde del martes, después se irán trasladando a zonas de la Meseta norte, el noreste peninsular y la Comunidad Valenciana. También regarán el archipiélago canario de manera ocasional, siendo más constantes el jueves en las islas occidentales.
Tras el paso de Lola, eso sí, todavía habrá que vigilar los satélites ante la alta probabilidad de que lleguen nuevas borrascas a España.
Aunque con mucho margen de incertidumbre, se prevé que el viernes se den lluvias muy fuertes en Aragón y Cataluña, así como puntos del área cantábrica por el descuelgue de un centro de bajas presiones. También podríamos ver tormentas puntuales en la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia, y lloviznas más débiles en Canarias.
El fin de semana, según los escenarios que por ahora parecen más posibles, será más tranquilo, quedando restringidas las precipitaciones a áreas del norte peninsular.