Este martes toca sacar de nuevo el abrigo y el paraguas en gran parte de España. Del sol de los días anteriores pasaremos poco a poco a los nubarrones a medida que una borrasca invernal envuelve la Península Ibérica para situarse finalmente en el Mediterráneo. Hay avisos por riesgo de fuertes lluvias con tormenta, viento y nieve en más de veinte provincias.
El sol que trajo tiempo seco y calor veraniego en Semana Santa se despide a partir de este martes, y no volverá en lo que queda de semana, dado que a la borrasca mediterránea que nos afectará hasta el jueves le seguirá una borrasca atlántica con más lluvia y más frío.
El martes y el miércoles, una borrasca mediterránea dejará chubascos y tormentas en la mitad oriental de la Península y en Baleares, con mayor intensidad en áreas peninsulares de montaña y próximas a la costa.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado el aviso amarillo (riesgo) por lluvias en cinco provincias este martes. Se producirán aguaceros durante la tarde, en algunos casos con tormenta y granizo, en el Pirineo oscense y en zonas de sierra de Teruel, donde caerán las mayores cantidades, así como en Valencia y Castellón.
Las lluvias más abundantes caerán el miércoles, cuando se producirán más hacia el este. Estarán en riesgo el norte de Castellón y el sur de Tarragona por la posibilidad de que caigan más de 60 litros por metro cuadrado en tan solo 12 horas. En estas provincias y en zonas de litoral de Valencia y Alicante se espera además que los chubascos sean con tormenta y granizo, como lo serán también en la Región de Murcia. También hay aviso por fuertes lluvias en las provincias de Huesca, Teruel, en el litoral de Guipúzcoa, la vertiente cantábrica de Navarra, zonas próximas a la costa de Girona, Barcelona y en la sierra de Jaén.
La cota de nieve se situará entre los 1000- 1200 metros, por lo que nevará en las áreas montañosas de la mitad norte y este peninsulares, informa la Aemet. Los mayores acumulados de nieve se darán en Guadalajara, Cuenca y Teruel -en aviso amarillo- con espesores de hasta 10 centímetros en un día, y algo menos caerá en el Pirineo de Navarra, Huesca y parte del Pirineo catalán, así como la cordillera Cantábrica y Picos de Europa en Asturias, León y Palencia a partir de 1.000 metros, la sierra Ibérica riojana y, el miércoles, también en áreas del interior de Castellón, en todo el entorno del sistema Central -Ávila, Segovia y Madrid-, en áreas de montaña de Soria y en la sierra de Jaén.
En general las temperaturas descenderán significativamente el martes y el miércoles, con caídas bruscas que pueden superar en muchas zonas de la Península los 12 grados en las máximas. En algunas provincias como León, Teruel y La Rioja hará unos 8 ºC por el día, y por la noche podrá incluso helar ligeramente al bajar la mínima hasta los cero grados.
A última hora de la tarde del martes, el viento podrá arreciar en zonas costeras de Pontevedra, formando olas de hasta 3 metros que irán yendo a menos la mañana del miércoles.
Por otro lado, a medida que la borrasca se desplaza al este, el viento se irá acelerando en Almería la tarde del martes, cuando el poniente puede golpear con rachas superiores a los 70 kilómetros por hora, y se formará un intenso temporal costero sobre todo de cara a la noche en las playas y calas tanto de Almería, como Granada y zonas de Málaga.
El temporal de vientos se fortalecerá el miércoles en prácticamente toda España, con intervalos de viento muy intensos en zonas de montaña, así como en las zonas costeras del Mediterráneo, con especial riesgo en Almería, Granada y Melilla, donde el aviso se elevará a nivel naranja. Las ráfagas podrán superar los 80 km/hora.
El jueves se espera que la borrasca mediterránea comience a alejarse hacia el este, por lo que su influencia se espera sólo en el extremo oriental peninsular y en Baleares.
Pero la inestabilidad no tardará en volver. El jueves por la noche se acercará una borrasca atlántica a España que afectará primero al oeste a la Península, con chubascos generalizados que se irán trasladando durante el viernes y sábado al resto de las zonas peninsulares. Durante la más de 10 horas seguidas, podría llover en zonas montañosas de Ávila, Toledo, Cáceres y en la Comunidad de Madrid.
Las temperaturas seguirán siendo más bajas de lo habitual en casi toda España, con menos de 12 grados de máxima en Madrid, Castilla y León, norte de Extremadura y parte de Castilla-La Mancha. Como consecuencia, veremos nieve en las zonas de montaña del norte el viernes, y el sábado también en el sureste, a partir de unos 1400/1600 metros en el sistema Central y norte del Ibérico, y en la cordillera Cantábrica, a 1200/1400 m.
Se espera que el domingo las precipitaciones tiendan a remitir, pero la incertidumbre en la predicción crece notablemente a partir del lunes, ha comunicado la Aemet.