El tiempo que hará en Nochevieja y en Año Nuevo en toda España: un frente frío dejará precipitaciones y riesgos amarillos

Un frente frío dejará este domingo, 31 de diciembre, precipitaciones en el norte de la Península, donde ocho provincias estarán en riesgo (amarillo) o riesgo importante (naranja) por fenómenos costeros, según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

En concreto, Girona estará en aviso amarillo por oleaje, mientras Cantabria, Guipúzcoa, Vizcaya, Lugo, Pontevedra y A Coruña tendrán alerta naranja por el mismo fenómeno, con olas de hasta siete metros, al igual que Asturias.

Las temperaturas mínimas subirán en el centro peninsular y disminuirán en el noroeste

En general, la Península se enfrentará al paso de un frente atlántico del noroeste hacia el sudeste, con aumento de nubosidad, que dejará precipitaciones en Galicia, Cantábrico, meseta Norte, alto Ebro y Pirineos. Además, no descartan precipitaciones débiles y dispersas en el resto de la mitad noroeste.

En el resto de la vertiente atlántica, la jornada empezará con nubes bajas matinales para dar paso a nubes medias y altas desplazándose hacia el sudeste por el centro y sur peninsulares, llegando nubes altas al área mediterránea oriental. Mientras, en Canarias se esperan intervalos nubosos en el noroeste del archipiélago, con baja probabilidad de precipitaciones débiles y poco nuboso en el resto.

Por su parte, las cotas de nieve se situarán en 1.400/1.600 metros bajando a 900/1.200 en la cordillera Cantábrica occidental, 1.200/1.400 en la Ibérica norte y 1.400/1.800 metro descendiendo a 1.000/1.400 en Pirineos. Además, este domingo no se descartan brumas y bancos de niebla matinales o postfrontales en la vertiente atlántica y valle del Ebro, que pueden ser persistentes en la Alcarria.

Por su parte, las temperaturas máximas descenderán en la vertiente atlántica y extremo norte, acusadamente en el noroeste, Pirineos y centro, y aumentarán en la vertiente mediterránea, acusadamente en el valle del Ebro y Levante.

Las mínimas subirán en el centro peninsular y disminuirán en el noroeste, con pocos cambios en el resto. En este contexto, se darán heladas débiles en áreas de montaña del centro, norte y sudeste y en el este de la meseta Sur, que serán más intensas en Pirineos, donde no se descartan que sean localmente fuertes.

Igualmente, el viento soplará de componente oeste, más intenso en la mitad norte y Baleares, con intervalos de fuerte de suroeste y oeste en el norte de Galicia y Cantábrico y rachas muy fuertes en montaña y litorales. En Ampurdán rolará de suroeste a noroeste y en Canarias se prevén vientos flojos de dirección variable o en calma.

Primera semana de enero

Ya el lunes, 1 de enero, se espera un día estable salvo en el extremo noroeste peninsular, donde el extremo de un frente cálido producirá lluvias débiles, las temperaturas bajarán en el valle del Ebro y los litorales mediterráneos y el viento soplará fuerte en los litorales y montañas de Galicia y el Cantábrico, según el aviso especial de la Aemet por Fiestas de Navidad.

Posteriormente, del martes 2 de enero al jueves 4 se prevé que continúe el paso de frentes atlánticos, más activos que en días anteriores, dejando cielos nubosos o cubiertos y precipitaciones en el tercio noroeste que a partir del miércoles se extenderían al resto de la vertiente atlántica, sin descartar que puedan afectar también a puntos del sureste y a Baleares, de forma débil. Estas precipitaciones podrían ser intensas y persistentes en el oeste de Galicia durante el martes.

Además, en estos días las temperaturas aumentarán al principio, con las heladas restringidas a las montañas del extremo norte, y descenderán a partir del jueves. Asimismo, el viento soplará del suroeste y oeste hasta el jueves, con rachas muy fuertes el martes en Galicia, la cordillera Cantábrica y el sistema Ibérico, sin descartarlas también en sierras del tercio oriental. Mientras, en Canarias habrá mayor incertidumbre aunque lo más probable es que continúe poco nuboso y con una pequeña probabilidad de lluvias débiles en las islas occidentales.

Ya el viernes 5 de enero, se espera un aumento de la estabilidad, si bien aún habrá probabilidad de que se produzcan algunos chubascos débiles y dispersos, principalmente en el extremo norte peninsular donde serían localmente moderados. Además, las temperaturas descenderán de forma generalizada y en Canarias se mantendrá la posibilidad de lluvias débiles en el oeste.

De cara al sábado 6 de enero y el domingo 7, la Aemet ha advertido de que aún hay "incertidumbre alta", si bien ha indicado que el tiempo estará condicionado por el posible acercamiento de una borrasca atlántica a la Península. En este contexto, ha señalado que, con la información actual, hay posibilidad de lluvias en el oeste y norte peninsular, mientras no se prevén cambios importantes en el área Mediterránea y en Canarias.

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