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El próximo 22 de diciembre a las 4:27, hora peninsular, comenzará el invierno, que se prevé de nuevo más suave de lo normal en todo el territorio y con más lluvias en el noroeste y el centro peninsular. Esto ocurre tras un otoño que se sitúa como el segundo más caluroso desde 1961, solo superado por una décima por el de 2022.
En una rueda de prensa para informar sobre la predicción estacional del invierno y hacer un resumen del otoño, Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ha avanzado que hay un 50% de probabilidad de que el invierno sea más cálido que la media durante los meses de enero, febrero y marzo. Esto no se aplica al sur peninsular y a los archipiélagos, porque en zonas como Andalucía y en las Baleares y Canarias, la probabilidad de tener un invierno más cálido se eleva al 60%, según señaló el portavoz.
En cuanto a las precipitaciones, resaltó que las predicciones indican un invierno “más húmedo” en el cuadrante noroeste peninsular y áreas de la zona central.
En lo que se refiere al año en curso (de enero a noviembre), la temperatura media global de 2023 ha llegado al nivel más alto registrado en la historia, situándose 1,46 ºC por encima del promedio de la era preindustrial y 0,13 ºC por encima del periodo equivalente de once meses en 2016, que hasta ahora tenía el título de año natural más cálido registrado.
Sobre el otoño boreal de 2023, se registra como el más cálido registrado en todo el mundo, con una temperatura media de 15,30 °C (0,88 ºC por encima de la media). La temperatura media europea de septiembre a noviembre alcanzó los 10,96 °C, superando la media en 1,43 °C. Esto coloca al otoño boreal de 2023 como el segundo más cálido jamás registrado, solo 0,03°C más frío que el otoño de 2020.
Samantha Burgess, directora adjunta del Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S), apuntó que en seis meses de 2023 se han batido récords y en dos estaciones también. Las temperaturas excepcionales de noviembre, con dos días superando en 2 ºC la temperatura preindustrial, hacen de 2023 el año más cálido registrado en la historia.
El director del C3S, Carlo Buontempo, enfatizó que, mientras las concentraciones de gases de efecto invernadero sigan aumentando, no se pueden esperar resultados distintos a los observados este año, ya que la temperatura seguirá en aumento. En su opinión, también se incrementarán los impactos de las olas de calor y las sequías. Buontempo cree que una gestión eficiente de los riesgos climáticos implica alcanzar la neutralidad en las emisiones de carbono lo antes posible.
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