La semana empieza con una ola de calor… Pero va a terminar con descenso térmico y tormentas en algunas zonas de España, que podrían extenderse los últimos días del mes de agosto. Los meteorólogos alertan de chaparrones.
Los termómetros seguirán subiendo este lunes 21 de agosto en uno de los "días álgidos" de una nueva ola de calor, la cuarta que se registra en lo que va de verano. Alrededor de 35 provincias están en alerta naranja y amarilla por altas temperaturas, que llegarán incluso a los 43 o 44 ºC en varias localidades.
A partir del miércoles existe una "elevada incertidumbre" en la predicción, ya que es probable que se inestabilice la atmósfera y se generen chubascos y tormentas en áreas del interior peninsular, lo que podría producir un descenso ligero de las temperaturas.
No obstante, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) apunta que continuarán siendo elevadas, y es probable que, tanto el miércoles como el jueves, todavía se alcancen los 38-40 ºC en el medio Ebro y depresiones del nordeste, así como en los valles fluviales del cuadrante suroccidental.
Las temperaturas continuarían descendiendo el viernes, lo que daría fin al episodio de ola de calor, si bien continuarán siendo elevadas en los valles del suroeste peninsular y en las depresiones del nordeste. Además, el fin de semana es probable que se produzca un descenso térmico más acusado.
“Con la llegada de la masa de aire más fría desde el noroeste, impulsada por una profunda borrasca atlántica, también llegarán más nubes y precipitaciones. Se retirará poco a poco el aire cálido de origen africano y tendremos menos horas de insolación con el consiguiente descenso de las temperaturas”, advierten los meteorólogos de Eltiempo.es.
Con la entrada de ese aire más frío por el norte, el fin de semana veremos más nubes y lluvia. “El frente que llega para la recta final de la semana parece ser activo y podría generar precipitaciones locamente intensas y tormentosas”, señalan los expertos.
Estas lluvias afectarían sobre todo a las comunidades del Cantábrico y los Pirineos, y entre el domingo y comienzo de la próxima semana a amplias zonas del noreste peninsular, así como las costas del Mediterráneo norte y Baleares.
No se descarta que lleguen también al entorno del Sistema Central y zonas montañosas de Andalucía.