La ola de calor ha pasado pero aún hay que andarse con ojo al salir a la calle y evitar el ejercicio en las horas centrales del día, porque las temperaturas son extremadamente altas. Y según advierte la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la segunda quincena de agosto podría traer más calor, más noches tropicales en las que resulta casi imposible conciliar el sueño, y sin una ausencia de lluvias casi total.
La Aemet tiene malas noticias: el calor no cesa, y la sequía no parece tener fin. Así lo ha hecho saber en su última predicción. Según ha anticipado, a finales de esta semana buena parte de España volverá a alcanzar los 38 o 40 ºC, incluso habrá zonas en el norte del país que lleguen o se acerquen mucho a los 35 ºC. Este calor también afectará a Baleares y Canarias.
De cara a la segunda mitad de la semana, habrá una subida "importante" de los termómetros en el área cantábrica, ha informado Rubén Del Campo, portavoz de la Aemet.
El jueves se volverán a superar los 35 ºC de forma generalizada en el nordeste, centro y sur de la Península, igual que en Mallorca y alcanzarán los 38 ºC en ciudades como Pamplona, Zaragoza, Lérida, Toledo, Sevilla, Córdoba o Granada, mientras en Bilbao llegarán a 30 ºC.
En cuanto al viernes y el fin de semana la Aemet considera que lo más probable es que se mantenga el tiempo estable en todo el país con temperaturas que subirán, por lo que el calor seguirá siendo intenso, "incluso un poquito más" y de nuevo se podrán superar los 40 ºC en la mitad sur.
Según las previsiones del centro europeo ECMWF, este calor persistirá la semana que viene con temperaturas que serán hasta 3 grados más altas de lo normal, y el trimestre septiembre, octubre y noviembre (lo que se conoce como el otoño meteorológico) se prevé también más cálido de lo habitual en prácticamente toda España.
Respecto a las lluvias, estas afectarán en forma de tormenta con posible granizo el miércoles, 16 de agosto, a zonas del noreste peninsular. Habrá “nubes y lluvias débiles en el Cantábrico, tormentas en general secas que podrían extenderse este día también a la meseta norte”, con fuetes rachas de viento son un peligro añadido a los incendios en las zonas de monte.
Pero los días siguientes apenas se prevén precipitaciones, y no hay una tendencia clara para la semana siguiente aún, pero parece que se impondrá el anticiclón de las Azores bloqueando el paso de borrascas.