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La canícula es el periodo más caluroso del año, que en España suele caer entre el 15 de julio y el 15 de agosto. No es raro que se alcancen temperaturas superiores a 35 ºC en gran parte del país entre esas fechas, y de manera frecuente los 40 ºC en el sur peninsular. Este año, parece que la canícula empezará con un “arreón térmico”. ¿A qué zonas afectará?
La canícula empezará fuerte este año. Una masa de aire muy cálido procedente de África podría traer temperaturas récord en el Mediterráneo, que quizá alcance los 45 ºC en la segunda quincena de julio. Esto no es lo normal.
La Real Academia Española (RAE) define como canícula el "periodo del año en que hace más calor". Este periodo generalmente, y atendiendo a los registros meteorológicos fiables que empiezan en 1961 en nuestro país, se produce entre el 15 de julio y el 15 de agosto. Aunque esto no siempre tiene por qué ser así, y depende mucho de la zona de España.
Últimamente estamos teniendo arranques de semana con temperaturas extremadamente altas, y la próxima no va a ser una excepción. Esta semana, por ejemplo, se han alcanzado máximas entre los 44 y 45 ºC en muchas localidades de Andalucía, Murcia y Canarias, y se han rozado los 43 ºC en puntos de Aragón.
La próxima semana, ya adentrados en la canícula, empezará con un subidón de las temperaturas generalizado el lunes, que el martes continuará en el área mediterránea.
“Se superarán los 36 ºC en amplias zonas del territorio; los 38 a 40 ºC en el centro y sur de la Península, y los 40 a 42 ºC en el valle del Guadalquivir”, avisa el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.
“El martes, además, se podrán superar los 38 a 40 ºC en zonas de Aragón, interior de las comunidades mediterráneas, puntos de Mallorca y en Andalucía oriental”, continúa.
La madrugada del martes será muy cálida, informa el experto de la Aemet, con noches tórridas en puntos del este y sur peninsular, y en Baleares.
El final de julio será más cálido de lo normal en la mayor parte de España, con anomalías más destacadas en el centro, sur y este peninsular, así como en ambos archipiélagos.
Parece, según las previsiones, que las lluvias brillarán por su ausencia, por lo que seguramente se volverá a hablar de la acuciante sequía de larga duración que afecta a nuestro país. No obstante, en la última semana de julio podríamos tener algún episodio de precipitaciones.
Aún es pronto para saber qué pasará en la primera quincena de agosto, pero es probable que haga más calor del habitual en buena parte de España. Respecto a las precipitaciones aún no hay una previsión clara.