El calor llega por la puerta grande a España. Esta semana alcanzaremos 40 grados en puntos del sur, y en muchas ciudades del interior y el noreste peninsular podríamos superar los 37 ºC. Pero hay algo que tiene más sorprendidos aun a los meteorólogos: el anticiclón de las Azores ha desaparecido. ¿Qué tiempo nos espera en la segunda quincena de junio?
El paso de la borrasca Óscar la pasada semana y una DANA en el comienzo de la semana actual ha hecho que los embalses se recuperen parcialmente (aunque seguimos con una preocupante sequía) y ha desplomado los termómetros temporalmente. Pero las altas presiones están de vuelta.
El resto de la semana va a ser cálida. Tórrida, de hecho. Alcanzaremos temperaturas 5 grados o más por encima del promedio para esta época del año. “Madrid alcanzará los 35 ºC; Zaragoza, Jaén, Sevilla o Badajoz los 38 ºC, e incluso Córdoba y localidades próximas del valle del Guadalquivir podrán alcanzar los 40 ºC”, ha indicado Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Además, tendremos noches tropicales en el sur y el este peninsular, así como ciudades del centro como Madrid, con temperaturas mínimas que no bajarán de los 20 o 22 ºC en toda la madrugada.
Será un paréntesis del tiempo inestable breve, porque el domingo se acercará una nueva borrasca atlántica.
“Los cielos estarán más nublados y seguramente se produzcan chubascos tormentosos, más frecuentes por la tarde en la mitad norte. Además, podría haber una bajada de las temperaturas que será acusada por el oeste y el sur peninsular”, señala el experto de la Aemet.
En algunas zonas aún hará calor. “Es probable que superen aún los 34 ºC en la cuenca del Ebro, en el prelitoral catalán, Mallorca, extremo sureste peninsular y en puntos de los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir”, dice.
La próxima semana comenzará de nuevo con lluvias y tormentas en puntos del norte y este de la Península, más probables por la tarde y más intensos en el entorno de la cordillera Cantábrica y Pirineos tanto el lunes como el martes.
A partir del miércoles (primer día del verano), nos espera un nuevo giro del tiempo. La atmósfera se estabilizará y subirán las temperaturas, con tiempo seco y cálido los días siguientes. De cara al fin de semana de San Juan volveremos a sacar los tirantes y la crema solar porque, entre el 23 y 25 de junio, los termómetros se dispararán nuevamente y rondaremos los 37 ºC de manera generalizada, y los 40 ºC en el sur de España.
En la mitad norte, aunque se mantiene la probabilidad de chubascos y tormentas la segunda mitad de la semana y el día de San Juan, irán disminuyendo en intensidad y extensión.
No está claro que pasará en la semana a caballo entre finales de junio y el comienzo de julio con las precipitaciones. Habrá que esperar para conocer la previsión, aunque parece que podrían predominar las altas presiones sobre España.
Lo que sí parece probable es que las temperaturas estarán entre 1 y 6 grados por encima de lo normal la última semana de junio.
El anticiclón de las Azores es un centro de altas presiones que hace de escudo frente a borrascas tradicionalmente por estas fechas en la Península Ibérica y el resto del suroeste de Europa.
Su desaparición, y más en esta época del año, es un hecho extrañísimo, que podría afectar a la circulación atmosférica en las próximas jornadas.
Además, hay otro factor que llama la atención en esta recta final de la primavera: las altas temperaturas que se están registrando en el Atlántico norte. Los expertos sospechan que la constante incursión de vientos procedentes de África, lo mismos que transportan polvo en suspensión procedente del Sáhara, han sido los responsables de disparar la temperatura en la superficie del mar.
En años anteriores, se han producido olas de calor marinas en el Mediterráneo, pero aún no sabemos del todo cómo este calor anómalo en el Atlántico norte podría afectarnos.