El verano ha asomado la patita antes de tiempo esta primavera. A las puertas de Semana Santa, que este año caerá entre el 2 y el 10 de abril, las temperaturas se han disparado en España de manera generalizada, aunque el tiempo va a cambiar en los próximos días y habrá dos escenarios muy diferentes: por un lado, varias comunidades autónomas seguirán sumidas en un ambiente templado, con noches algo frías, mientras que otras tendrán lluvias por el acercamiento de borrascas. ¿En qué ciudades hará más calor?
Canarias ha rondado los 30 ºC esta madrugada en los observatorios de San Sebastián de la Gomera y en Pájara (Fuerteventura). Esto sería anómalo incluso en verano, pero a finales de marzo se trata de una temperatura mínima extraordinaria. En la Península, se han rozado los 15 ºC en zonas de Cádiz y Málaga, algo que también resulta muy inusual en el comienzo de la primavera.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha actualizado la previsión del tiempo para Semana Santa, y anticipa que habrá cambios drásticos con respecto a esta semana.
El Domingo de Ramos las temperaturas bajarán por un giro en los vientos, que traerá aire más fresco a España. El frío se notará especialmente por la noche, “incluso habrá de madrugada algunas heladas en zonas de montaña, puntos de la meseta norte y en páramos del centro peninsular”, ha informado Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.
El día será fresco para la época en la mitad norte, con temperaturas máximas hasta 5 ºC por debajo de lo normal para la época. “Burgos o Vitoria a duras penas alcanzarán los 11-12 ºC”, pone como ejemplo el meteorólogo. En el resto del país, en cambio, las temperaturas serán las normales para esta época del año, incluso hará algo de calor en el sur: “En Sevilla o Huelva se alcanzarán los 26 ºC”.
Así, mientras en el sur y puntos del Levante todavía habrá ambiente templado, en el norte y centro no solo volverá el frío nocturno sino que además podrán darse nevadas por encima de 1.000 metros en la Cordillera Cantábrica, norte del sistema Ibérico y en los Pirineos.
De cara a la próxima semana, por un lado, el tiempo anticiclónico y estable continuará en gran parte de España, aunque “la llegada de vientos fríos continentales hará que la madrugada del lunes sea fría, con heladas por ejemplo en Ávila, donde el termómetro bajará hasta -1 ºC”, pronostica el experto de la Aemet. Tendremos lo que se conoce como ‘los días de la cebolla’, en los que hay que llevar muchas capas de ropa, con mucho frío de noche y ambiente templado de día.
Por el día, el martes y miércoles se superarán los 18 ºC en amplias zonas del país, y los 25 ºC en el tercio sur peninsular, rondando los 28 a 30 ºC en el valle del Guadalquivir.
Eso, por un lado. La “otra España” es la que vivirá un tiempo más inestable. Si bien en general no esperamos lluvias en toda la Semana Santa, no se descarta que se produzcan de manera ocasional en puntos del extremo norte y de Baleares entre el lunes y miércoles.
A partir del Jueves Santo, aumenta la incertidumbre. “Es posible que sea un día en general con tiempo estable con temperaturas en ascenso, pero de cara al Viernes Santo podrían retirarse las altas presiones al norte de Europa, lo cual podría hacer que se notasen en la Península Ibérica la influencia de las bajas presiones”, dice el meteorólogo.
“Podría aumentar la inestabilidad, de manera que no podemos descartar el viernes y fin de semana la ocurrencia de algunos chubascos, en general débiles y poco importantes, los típicos chaparrones primaverales, propios de esta época del año, que podrán afectar a zonas de la Península”, concluye.