Las fuertes lluvias del ciclón Gabrielle han causado inundaciones y deslizamientos de tierra mortales en el norte de Nueva Zelanda. El temporal se ha cobrado la vida de al menos 4 personas, y la cifra de víctimas podría aumentar considerablemente, puesto que la policía habría recibido más de mil informes de desaparecidos.
El gobierno de Nueva Zelanda ha declarado un estado de emergencia nacional, algo que solo había ocurrido en dos ocasiones anteriores. El ciclón Gabrielle ha causado inundaciones, deslizamientos de tierra y marejadas en toda la Isla Norte tan solo unas semanas después de que otra tormenta obligase a dejar sus hogares a miles de personas en las mismas zonas con el agua al cuello.
Entre las regiones más afectadas está Hawke's Bay, no muy lejos de Auckland, donde se ha encontrado el cuerpo de una de las cuatro víctimas mortales del temporal, que pertenece a un niño, así como los cuerpos de otros dos fallecidos. Las autoridades tendrían ahora “graves preocupaciones” por las personas que permanecen desaparecidas.
"Quiero dejar muy claro que no es una expectativa, es una preocupación que tengo constantemente, estamos hablando de un fenómeno climático masivo sin precedentes", ha expresado el ministro de Emergencias neozelandés, Kieran McAnulty.
Lo peor de la tormenta ya habría pasado, pero aún hay peligro, por lo que los desplazados aún no pueden volver a sus hogares.
Alrededor de un tercio de la población de Nueva Zelanda vive en las áreas afectadas. El total de desplazados supera las 10.000 personas, y aún hay regiones completamente aisladas por las inundaciones, así como miles de hogares sin energía e incapaces de comunicarse.
El primer ministro asegura que es la peor devastación por un fenómeno climático que ha visto “una generación”.
Por si fuera poco, tras las inundaciones causadas por el ciclón Gabrielle se ha registrado un terremoto de magnitud 6,1 cerca de Wellington, también en la Isla Norte. Según los reportes, miles de personas lo habrían sentido, aunque por ahora se desconoce cuáles han sido las consecuencias.