Esta semana, en el colegio Sagrado Corazón de Vitoria-Gasteiz (Álava) se vivió un momento muy especial y emotivo. La cuenta del centro educativo compartió en sus redes sociales el miércoles la sorpresa que los alumnos le dieron a un profesor.
Eduardo se jubila, así que niños y niñas de la escuela le brindaron una gran ovación. Tal fue la despedida que el docente estuvo recorriendo el pasillo con una enorme sonrisa de oreja a oreja, todo el tiempo.
Numerosos escolares se reunieron en una zona del colegio, también junto a otros maestros y maestras, para aplaudirle durante varios segundos. Aunque a él le dio un poco de vergüenza al principio, ya que amagó con escaquearse del acto.
El profesor se disponía a bajar las escaleras desde otra planta del centro, pero al ver a tanto alumno colocado en las paredes del pasillo, volvió sobre sus pasos hacia arriba. Sin embargo, acabó descendiendo para darse un baño de masas.
Además de los incesantes aplausos, los pequeños y las pequeñas empezaron a abrazarle, rodeándolo por completo. "¡Eduardo, Eduardo, Eduardo!", se pudo escuchar también corear. A paso tranquilo y repleto de una alegría que se le veía en la cara, él siguió caminando.
En el vídeo se puede escuchar incluso el himno ochentero 'The final countdown' de Europe, sonando de fondo hasta que finaliza. La publicación de los 'corazonistas' de Vitoria-Gasteiz incorpora una frase para el docente:
"Queremos expresar nuestra más sincera gratitud por tu labor histórica en nuestro colegio. Tu dedicación y compromiso a lo largo de los años han dejado una huella imborrable en nuestra comunidad educativa".
Varios usuarios han respondido estos días atrás a la despedida de Eduardo, destacando que "se ve respeto y mucho cariño" hacia él, como dice una tal Marisa. "Qué preciosidad acabar así tu etapa", dice otra mujer.
Álvaro, ya adulto, pero que fue alumno suyo, reconoce que ahora tendrá "una jubilación merecida". El resto de personas hablan de un acto "muy bonito" para despedirle del colegio.