El significado de adeudo en cuenta y sus diferencias con el adeudo domiciliado
Adeudo en cuenta y adeudo domiciliario son dos formas distintas de pagar tus impuestos: descubre la que más te conviene
En materia de pago de impuestos, un concepto clave que debes manejar es el de adeudo en cuenta, distinto del de adeudo domiciliado. Comprender el significado de estas dos ideas te ayudará a no cometer errores a la hora de cumplir con tus obligaciones tributarias y cumplir con Hacienda de la forma más cómoda para ti, por ejemplo, cuando vayas a pagar el IRPF, si es que tu declaración ha salido a ingresar. ¿Qué es el adeudo en cuenta y en qué se diferencia del adeudo domiciliado?
Adeudo en cuenta: diferencias con el adeudo domiciliado
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La diferencia entre adeudo en cuenta y adeudo domiciliado es sencilla: tal y como explican desde Hacienda, existen dos formas de pagar impuestos:
- Cuando la forma de pago elegida sea el adeudo en cuenta, el pago será cargado en el mismo momento en el que se presente la declaración en la entidad financiera. Si dispones de certificado electrónico, puedes realizar el Pago Telemático y presentar la declaración a continuación, a través de Internet. Para ello, deberás obtener el NRC (Número de Referencia Completo, justificante del pago). Así, al firmar y enviar la declaración en la página web de la Agencia Tributaria, deberás adjuntar el NRC proporcionado por el banco.
- Al contrario, cuando optes por un pago vía adeudo domiciliado, lo que estarás realizando es una orden de pago a una entidad bancaria para que ésta abone una cuantía determinada al beneficiario, en este caso, Hacienda. Funciona exactamente igual que cualquier domiciliación, y deberás informar obligatoriamente sobre la cuenta bancaria en la que se cargará el pago del impuesto de que se trate.
Hacienda también explica que el NRC (Número de Referencia Completo) es el código generado por la entidad bancaria como justificante para identificar un ingreso tributario. Consta de 22 caracteres alfanuméricos, entre los que se incorpora, de forma cifrada, la información del NIF del declarante, el importe, el modelo, el ejercicio y el periodo. Se trata de la vía más sencilla para pagar un impuesto: puedes pagar a través e tu banca electrónica y usar el código obtenido para completar el Modelo del impuesto de que se trate, y presentarlo demostrando que el ingreso ya se ha llevado a cabo.