Gobierno, sindicatos y empresarios volverán a mantener contactos este lunes con el objetivo de intentar cerrar la prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).
El Ejecutivo planteó este domingo, en una reunión de urgencia, una propuesta en la que ofrece exenciones a la Seguridad Social de mayor cuantía a las empresas que formen a sus trabajadores suspendidos.
Durante la reunión celebrada este domingo, el Gobierno ofreció a los agentes sociales un nuevo esquema para extender los expedientes de regulación temporal de empleo. En concreto, el Ejecutivo ha ofrecido, dentro de los ERTE de limitación de actividad, exenciones del 20% para empresas de más de 10 trabajadores que no ofrezcan formación a sus empleados y del 50% si imparten acciones formativas.
Para las empresas más pequeñas, de menos de 10 trabajadores, estas exoneraciones alcanzarían el 50% sin formación y el 70% con formación.
En los ERTE de impedimento de actividad, las exoneraciones para todas las empresas serían del 100% en todos los casos, según la propuesta planteada por el Gobierno.
Para poder acogerse a estas exenciones en sus cuotas, las empresas tendrán que dedicar 30 horas de acciones formativas en el caso de las de 10 a 49 trabajadores y 40 horas en las que tengan plantillas superiores.
Según las mismas fuentes, las actividades formativas se vinculan con un aumento del crédito que se utiliza para financiar la formación programada recogida en ley del sistema de formación profesional para el empleo.
Este crédito se obtiene a partir de las aportaciones de empresas y trabajadores a la Seguridad Social con el objetivo de que inviertan en la formación profesional de sus empleados.
Sin embargo, este esquema de exoneraciones vinculadas a la formación no convence a las organizaciones empresariales CEOE y Cepyme. De hecho, fuentes empresariales consultadas por Europa Press han indicado que, aunque ha habido avances en las negociaciones, el tema de las exoneraciones está dificultando el poder llegar a un acuerdo.
Lo mismo asegura UGT. "El escollo de las exoneraciones vinculadas a las acciones formativas impide que, de momento, se pueda alcanzar un acuerdo, como todos deseamos, en el que estén todas las partes del diálogo social", apunta el sindicato.
Ni UGT ni CCOO ven con buenos ojos que este momento se quiera vincular la formación con los ERTE, una medida que estaba pensada para incluirla en el mecanismo estructural que sustituirá a los ERTE Covid una vez pase la pandemia y que Gobierno y agentes sociales están negociando en el marco de la reforma laboral.
La propuesta que ha puesto el Gobierno sobre la mesa contiene mejoras demandadas por los sindicatos, pues se mantienen los beneficios relacionados con la prestación por desempleo de los trabajadores, protección para los fijos-discontinuos, y el 'contador a cero' se extiende hasta el 1 de julio de 2022.
Además, según UGT, se mantiene el compromiso de mantenimiento del empleo para las empresas con ERTE; la prohibición de despedir; la interrupción del computo en contratos temporales; la prohibición de realización de horas extras; el impedimento de realizar contrataciones nuevas en empresas que están aplicando ERTE, y la imposibilidad de externalizar actividad mientras se disfrutan de los beneficios de los ERTE.