Ayer, tras casi cuatro horas de conversaciones con empresarios y sindicatos, el Gobierno no alcanzaba un acuerdo sobre la prórroga de los ERTE vinculados al coronavirus. La propuesta del Ejecutivo es extenderlos hasta el 30 de septiembre, una posición que choca con las demandas sindicales y empresariales de alargarlos hasta el 31 de diciembre.
El Ejecutivo propone ampliar los ERTE en todos los sectores hasta el 30 de septiembre con una rebaja de las bonificaciones de las cuotas sociales. La Patronal rechaza esa propuesta y aboga por extender el mecanismo de ayuda pública hasta el 31 de diciembre.
En el borrador del Decreto Ley que no satisface por ahora a los agentes sociales se incluyen novedades. No podrán efectuarse horas extras, ni concertarse nuevas contrataciones en la empresa si hay alguna persona afectada por el ERTE.
El Ejecutivo mantiene también la suspensión del despido procedente en las empresas que se acojan a esos expedientes de regulación temporal de empleo. La intención de la Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, era aprobar hoy mismo en el Consejo de Ministros la prórroga pero finalmente se ha comprometido a no hacerlo para dar prioridad al diálogo social.
A lo largo de la semana están previstas nuevas reuniones para tratar de alcanzar un acuerdo. De momento la regulación de los ERTE asociados al COVID está vigente hasta el próximo 30 de junio