La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, ha advertido de que la economía mundial entrará este año en una recesión "tan mala o peor que la de 2009" como consecuencia del impacto de la epidemia de coronavirus y de las medidas de contención implementadas por muchos países.
Georgieva ha subrayado durante una conferencia de prensa que la recuperación proyectada para 2021, "cuando puede haber un considerable rebote", dependerá de que se logre controlar el virus en todas partes y se evite que los problemas de liquidez se transformen en una crisis de solvencia.
La directora del FMI se a mostrado muy preocupada por que una oleada de quiebras y despidos no solo socaven la recuperación, sino que hagan descarrilar las sociedades. También ha destacado los esfuerzos fiscales y monetarios de muchos países para amortiguar el impacto de la pandemia, incluyendo un esfuerzo agregado de más de 4,5 billones de euros por parte de los países del G20.
Georgieva ha considerado "una medida bien dirigida" el plan de estímulos de 1,81 billones de euros aprobado en Estados Unidos, que ayudará a amortiguar el golpe del Covid-19 no solo en el país, sino en todo mundo. Sin embargo, Georgieva, que ha cifrado en 23 billones de euros las necesidades de financiación estimadas para las economías en desarrollo, ha reiterado que un número "excepcionalmente elevado" de países requiere de ayuda de emergencia de la institución. Por ello subraya la necesidad de "duplicar" su capacidad para prestar asistencia.
En ese sentido, la directora del FMI ha indicado que 80 países se han dirigido a la institución en busca de asistencia financiera de emergencia, incluyendo países de bajos ingresos y de ingresos medios, señalando que, de esta cifra, tres cuartas partes corresponden a solicitantes de asistencia financiera y una cuarta parte a consultas, aunque ha afirmado que es probable que acaben solicitando ayuda financiera.