Con la inflación disparada, ahorrar en la factura eléctrica supone un alivio. Pero no siempre es posible y, precisamente, el cambio de hora no es el mejor antídoto para ello. Pese a ser una práctica muy común que realizamos, hasta en dos ocasiones al año, te explicamos cómo puede afectar el cambio horario a tu factura eléctrica.
Como tal, el cambio horario no afecta a la factura de la luz. No obstante, el cambio en las horas de luz natural que aportan tanto la llegada del invierno como del verano sí influyen directamente. Durante el verano, se cuentan con más horas de luz natural por las mañanas y anoche más tarde, por lo que se deja de consumir energía en el horario llano, que es cuando el precio de la luz es intermedio.
En cambio, durante el invierno, se cuenta con menos horas de luz natural, ya que oscurece antes. Un aspecto a tener en cuenta si se tiene contratada una tarifa con discriminación horaria.
Los cambios horarios acaban afectando a los biorritmos de las personas. Las rutinas se ven alteradas y, con ello, la economía doméstica. Algo a tener en cuenta es la tarifa 2.0TD, que sustituyó a otras anteriores como las tarifas de acceso 2.0 y 2.1.
Fue en 1981 cuando se acordó que España ajustaría sus relojes, durante los últimos fines de semana de marzo y octubre, para minimizar el uso de la luz y aprovechar la natural. Una medida que también aplicó Europa. Pese a que en 2018 se barajó su supresión, en la madrugada del 26 al 27 de octubre comenzará el horario de invierno y los relojes se retrasarán una hora: a las 03:00 horas serán las 02:00 horas y el domingo tendrá 25 horas.
En la UE se planteó eliminar los cambios horarios y el 80% se mostró favorable a ello. En el caso de España, no se llegó a ninguna resolución salvo una encuesta formulada por el CIS. En la misma se recogía que el 65% de los españoles estaban a favor de eliminar los horarios. Pero, hasta la fecha, todo se mantendrá como hasta ahora, al menos, hasta 2026. Una estrategia que tiene como objetivo reducir el impacto medioambiental, pero no el impacto económico en los hogares de los consumidores.
Tomando como referencia el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE), se considera que el cambio horario reduce el consumo en un 5%, por lo que es posible ahorrar 90 millones de euros en los hogares españoles.
Dicho esto, si se analiza a fondo, el ahorro sería de unos seis euros por hogar en España. Pese a todo, desde 2015 no se hacen estudios sobre el impacto real que posee el cambio horario sobre el consumo de energía.
El horario de verano implica un mayor número de horas de luz natural y, por ende, un menor uso de luz artificial. También es cierto que coincide con los meses de mayores temperaturas, por lo que al final lo que se ahorra en el encendido eléctrico se destina al encendido de aparatos de refrigeración. En determinadas zonas de España, al ser la temperatura más cálida, se pasa menos tiempo en el exterior. Pese a todo, pequeños gestos como tender la ropa al sol, en lugar de emplear secadoras, favorecen a la factura eléctrica.
Dependiendo de la zona de España en la que residamos, experimentaremos un mayor ahorro en invierno o en verano. Hay que tener en cuenta que, en la mitad norte peninsular, la calefacción supone el 63% del consumo energético de los hogares españoles (según datos del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico).
El cambio de hora solo debe ser tenido en cuenta si se tiene contratada una tarifa con discriminación horaria. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el cambio de hora puede llegar a generar un ahorro del 5% en iluminación, equivalente a unos 300 millones de euros, de los cuáles 90 millones corresponden al potencial de hogares españoles, y el resto sería de edificios del sector terciario y de la industria
Existen una serie de consejos básicos que se pueden tener en cuenta para reducir el consumo energético y maximizar la eficiencia, ahorrando en la factura eléctrica.
En primer lugar, la planificación de las tareas domésticas. Hay tareas como cocinar o planchar que generan elevadas temperaturas, por lo que es importante gestionar bien los horarios para realizarlas en las horas más frescas del día. Se puede optar por alimentos que no requiriesen del uso de electrodomésticos de alto consumo.
Otro consejo es programar los electrodomésticos para adaptarlos al horario de inverno o de verano. Algo muy recomendable para las personas que cuentan con tarifa con discriminación horaria. De ahí que sea óptimo el hecho de recurrir a temporizadoras, capaces de programar el funcionamiento de los aparatos en las horas más económicas.
Cuando llega el invierno, en el que las horas de luz natural se reducen, será ideal optar por el autoconsumo fotovoltaico. Además de minimizar la huella medioambiental permite ahorrar hasta un 70% de consumo en la tarifa eléctrica. Si se logra controlar la temperatura del hogar, en el uso de calefacciones en invierno y de aires acondicionados en verano, se podría ahorrar unos 20 euros mensuales.
Dependiendo de la dependencia energética de nuestra casa, tendremos un ahorro o no en la factura de la luz. El cambio de hora como cada año implica que se hace de noche más tarde, pero si tenemos una lavadora, secadora y una vitrocerámica a pleno rendimiento poco influye. De ahí que el ahorro energético se logre gracias a la eficiencia energética, y no tanto por los husos horarios.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.