El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha decidido este miércoles aprobar por unanimidad una subida de los tipos de interés del país de 25 puntos básicos, hasta situarlos en un rango objetivo de entre el 5,25% y el 5,50%, su nivel más alto desde enero de 2001.
De este modo, el banco central estadounidense reanuda la senda de endurecimiento de su política monetaria tras la pausa adoptada en la reunión de junio, tras diez subidas de tipos consecutivas, ampliando a once los incrementos del precio del dinero acometidos desde que comenzase la secuencia en marzo de 2022.
"El Comité continuará evaluando información adicional y sus implicaciones para la política monetaria", ha indicado el banco central, que, para determinar el grado de endurecimiento adicional de la política que puede ser apropiado para devolver la inflación al 2% con el tiempo, "tendrá en cuenta el endurecimiento acumulativo de la política monetaria, el decalaje con el que la política monetaria afecta la actividad económica y la inflación, y el desarrollo de los factores económicos y financieros". Al evaluar la postura apropiada de la política monetaria, el Comité de la Fed ha asegurado que continuará monitoreando las implicaciones de la información entrante para el panorama económico.
De este modo, la institución ha subrayado que el Comité estaría preparado para ajustar la postura de la política monetaria "según corresponda" si surgen riesgos que pudieran impedir el logro de los objetivos. A este respecto, la entidad ha destacado que los indicadores recientes sugieren que la actividad económica se ha estado expandiendo a un ritmo moderado, mientras que la creación de empleo ha sido sólida y la tasa de desempleo se ha mantenido baja, aunque "la inflación sigue elevada".
Asimismo, el banco central ha destacado que el sistema bancario estadounidense "es sólido y resistente", considerando probable que, unas condiciones crediticias más estrictas para los hogares y las empresas, pesen sobre la actividad económica, la contratación y la inflación, aunque ha admitido que el alcance de estos efectos "sigue siendo incierto", por lo que permanecerá muy atento a los riesgos de inflación.
El índice de precios de consumo (IPC) de Estados Unidos se situó en el 3% interanual en el mes de junio, con una moderación de un punto porcentual respecto a mayo, en lo que representa la menor subida de los precios desde marzo de 2021. De su lado, el índice subyacente, que excluye de su cálculo los precios de los alimentos y la energía por su mayor volatilidad, cerró el sexto mes de 2023 con un incremento interanual del 4,8%, cinco décimas menos que el mes anterior. Respecto al PIB, la primera economía del mundo creció un 0,5% en el primer trimestre de 2023 en comparación con los últimos tres meses del año pasado, una décima por debajo de la expansión registrada en el cuarto trimestre de 2022.
El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ha destacado la moderación en la subida de los precios observada recientemente, pero ha advertido de que el proceso de bajar la inflación "tiene un largo camino por recorrer", aunque ha evitado pronunciarse sobre si el banco central volverá a subir los tipos de interés en la reunión de septiembre, limitándose a defender que la decisión se adoptará en función de los datos. De cara al futuro, Powell ha defendido la necesidad de adoptar un enfoque dependiente de los datos para determinar el grado endurecimiento adicional de la política monetaria que puede ser apropiado.
"Vamos a necesitar ver más datos", ha afirmado el presidente de la Fed, para quien es tan ciertamente posible subir los tipos nuevamente en la reunión de septiembre "si los datos lo justifican", como también considera posible optar por mantenerlos estables en esa reunión. "Vamos a hacer evaluaciones cuidadosas, como dije, reunión por reunión", ha asegurado el banquero central estadounidense haciendo suyo el discurso manejado desde hace meses por su homóloga al frente del Banco Central Europeo, Christine Lagarde.
En este sentido, Powell ha recordado que, entre ahora y la reunión de septiembre, faltan por publicarse dos informes de empleo más, así como dos informes de inflación y muchos datos sobre la actividad económica.
Sin embargo, ha advertido de que "tomará tiempo que los efectos completos de la actual restricción monetaria se hagan realidad, especialmente en la inflación", añadiendo que, para determinar el grado de endurecimiento adicional de la política que puede ser apropiado para devolver la inflación al 2% con el tiempo, el Comité tendrá en cuenta el endurecimiento acumulativo de la política monetaria y el decalaje con el que se transmite.
En cualquier caso, el presidente de la Fed ha señalado que aparentemente es que la política no ha sido lo suficientemente restrictiva durante el tiempo suficiente para tener todos los efectos deseados, por lo que ha expresado la intención de mantener la política restrictiva hasta estar seguros de que la inflación está bajando de manera sostenible al objetivo del 2%.
"Tenemos que estar listos para seguir los datos, y dado lo lejos que hemos llegado, podemos darnos el lujo de ser un poco pacientes, además de decididos", ha apostillado.