Los cambios en pensiones: jubilación a la carta, mayor hucha y subida de cotizaciones
El Gobierno propone que la pensión se calcule con 25 años cotizados o con 29, excluyendo los dos peores
Se extiende hasta 2050 y se incrementa la 'derrama' en las cotizaciones sociales para llenar la llamada hucha de las pensiones
Algunos expertos critican los cambios porque no garantizan la sostenibilidad y los empresarios la rechazan frontalmente por "regresiva"
Más o menos era lo que se había anunciado excepto en un aspecto: las cotizaciones sociales. El Gobierno ha tenido que ofrecer a la Comisión Europea más garantías de que la última pata de la reforma de las pensiones cerraba el círculo y garantizaba la sostenibilidad del sistema. Y para eso, la especie de 'derrama' que iba a durar diez años ahora se extenderá hasta 2050. Y además, las aportaciones se incrementarán respecto al esquema inicial.
Aunque quizá no es el cambio más llamativo de la propuesta, ahora explicamos lo de ampliar a 29 años para calcular la pensión, esa 'derrama' tendrá un impacto generalizado entre trabajadores y empresarios, que son los que pagan las cotizaciones sociales. Esto explica por qué la CEOE y el resto de patronales han rechazado "frontalmente" la nueva reforma, que tildan de "regresiva en toda su extensión".
MÁS
También se plantea otro incremento de las cotizaciones subiendo la base máxima, la cantidad de referencia para calcular lo que se paga a la Seguridad Social. En 2023 subió lo mismo que la inflación y los empresarios lo calificaron de "impresentable". A partir de 2024 habrá una regla: cada año se incrementarán lo mismo que la inflación "más una cuantía fija de 1,2 puntos porcentuales", apuntan fuentes de la mesa de negociación. Eso generará más ingresos para pagar las pensiones.
Para el Gobierno, esta última parte de la reforma -- y de la que dependía el cobro del próximo tramo de fondos europeos-- "supone completar las bases del sistema para los próximos 30 años". Tres décadas de una enorme complejidad para las que había que prepararse: viene la jubilación del baby boom.
Pensión a la carta: ¿calcular con 25 o 29-2 años?
Una de los objetivos de esta reforma era diseñar un sistema que no penalizara a las personas que han tenido "carreras irregulares". Trabajadores que quizá han vivido sus peores años laborales más hacia el final de su vida laboral. Para estos casos, cada vez más habituales según el ministerio, se ha ideado una especie de jubilación a la carta:
- O se calcula su pensión como hasta ahora: en base a lo cotizado en los últimos 25 años.
- O se calcula con los 29 últimos años pudiendo descartar los dos peores.
- Los cambios se introducirán progresivamente durante 12 años a partir de 2026.
El trabajador elige. En un principio, la ampliación del periodo de cómputo se quería extender a todo el mundo. Eso habría supuesto seguramente menores pensiones. Pasar de los 15 años de antes a los 25 actuales ha supuesto cobrar un 5% menos de pensión, según los cálculos de un estudio del Banco de España.
Al convertir esta idea en opcional no se perjudica a nadie y se mejora un poco la de algunos casos concretos.
La derrama para hacer frente a la jubilación del baby boom durará hasta 2050
Decíamos que la mayor parte de los cambios vienen por el lado de los ingresos, las cotizaciones sociales. La sostenibilidad del sistema de pensiones dependía mucho de cómo de bien preparada estuviera España para hacer frente al incremento de gasto que va a suponer la jubilación del baby boom. Por empezar a hablar con algo más de propiedad: el nombre oficial de la 'derrama' es MEI (Mecanismo de Equidad Intergeneracional). Se lo inventó el Gobierno actual y entró en vigor el pasado 1 de enero. Desde entonces trabajadores y empresas pagan un 0,6% más de cotizaciones sociales (0,1 puntos el primero y 0,5 puntos el segundo, respectivamente).
- Iba a durar hasta 2032, pero ahora se propone extenderlo hasta 2050. Esta modificación ha venido impuesta desde Bruselas. El Gobierno era más partidario de esperar y, si era necesario, ajustar dentro de unos años.
- Además, el MEI va a pasar del 0,6% actual al 1,2% en 2029, a un ritmo de una décima de subida por año.
- Las seis décimas de ahora iban a recaudar 2.800 millones al año. Si el porcentaje se duplica, podríamos estar hablando de ingresos por el MEI superiores a los 5.000 millones de euros al año.
Además del MEI se añade un nuevo instrumento que antes no figuraba: la cuota de la solidaridad. En este caso la pagarán sólo los salarios más altos. ¿Cobra menos de 4.500 euros brutos al mes en la actualidad? Olvídese, queda fuera. Solo los trabajadores que superen ese umbral aportarán adicionalmente a la hucha. Empezarán en 2025.
- Se aplicará un 1% a la parte del salario que no cotiza ahora.
- Ese porcentaje se irá subiendo a un ritmo de 0,25 puntos por año hasta llegar al 6% en 2045.
- "Por ejemplo, a una persona que gane 500€ por encima del tope máximo de cotización, cotizaría cinco euros adicionales en 2025 cada mes", explican fuentes de la negociación.
El dinero que se recaudará con la aplicación de estas dos medidas irá directamente a llenar la llamada 'hucha de las pensiones', oficialmente 'Fondo de Reserva de la Seguridad Social'. Ahora quedan 2.000 millones de euros, una quinta parte de lo que cuesta pagar una nómina entera mensual a todos los pensionistas. "El objetivo es crear un “colchón” de reserva para afrontar tensiones de gasto, en línea con los que existen en otros países.
¿Se consigue la sostenibilidad?
Si la Comisión Europea ha dado su visto bueno a estos cambios, es porque entiende que se garantizan ingresos suficiente para lo que se avecina en las cuentas de la Seguridad Social. Desde luego es más de lo que había planteado el ministro Escrivá.
- Desde el PP se ha criticado que la reforma se base, principalmente, en subir cotizaciones sociales, "un impuesto más al trabajo".
- La CEOE asegura que la reforma "mermará los salarios de todos los trabajadores e incrementará los costes laborales poniendo en peligro la creación de empleo".
- La visión del Gobierno es que el coste es asumible por las empresas, porque los costes laborales por hora están por debajo de la media de la zona euro.
- También es verdad que España recauda menos vía cotizaciones que otros países europeos. Pero el reparto diverge de la media. En nuestro país el peso recae más en las empresas que en los trabajadores.
- Así que, todas las medidas que supongan un aumento de estas cotizaciones, se notarán más en un lado que en otro.
Desde el mundo académico algunos expertos dudan de que el MEI + cuota de solidaridad + aumento de las bases máximas sea suficiente. "El déficit de la Seguridad Social es progresivo y será bastante elevado. A corto plazo da igual, la batalla está perdida", apunta un economista. "El objetivo electoral prima respecto a cualquier decisión razonable a medio y largo plazo".