Cada vez falta menos para la llegada del Black Friday 2022 que, este año, se celebrará el 25 de noviembre. Sin embargo, esto no significa que tengas que esperar hasta esta fecha para aprovechar el periodo de oferta: cada vez más comercios se suman a la moda de 'estirar' esta jornada y diseñar su propia estrategia de marketing, con distintos periodos de ofertas para diferentes productos. Nada lo impide: cada marca o tienda es libre de diseñar su propia oferta comercial, por lo que, si tienes claro qué quieres comprar, puede ser buena idea analizar lo que te ofrece cada uno de ellos y prepararte para el momento clave con cierta antelación. Además, conviene seguir ciertos consejos para evitar sustos durante tus compras. Toma nota de qué debes hacer para comprar de forma segura (y sin excesos) este Black Friday 2022.
El Black Friday se ha convertido en una fecha señalada en nuestro calendario en lo que a consumo se refiere. Muchos aprovechamos para adelantar compras navideñas a mejor precio, otros hacemos nuestra compra tecnológica del año haciendo uso de los grandes descuentos que se asocian a este área... Se trata de un buen momento para hacerse con esos elementos relativamente caros que necesitamos en nuestro hogar a un precio más asequible: es el caso de electrodomésticos, ordenadores... Pero también hay hueco para los caprichos: ropa, perfumes, cosmética... se encuentran en la lista de productos de éxito durante el Black Friday. Este año, la inflación promete hacernos adelantar más que nunca las compras navideñas.
Lo más importante es tomárselo con calma y hacer bien los deberes antes de comprar. Prácticamente cualquier consejo relacionado con tus compras durante esta jornada tiene su origen en estas dos ideas: por ejemplo, el primer paso suele ser definir un presupuesto y una lista de deseos, algo que te aportará herramientas de decisión antes de que llegue el momento de pagar. Este simple gesto te ayudará a ahorrarte muchos sustos (lógicamente, si te tomas en serio los límites que hayas definido).
También lo tendrás más fácil a la hora de hacer tus compras online si llevas este listado claro, esquivando así con mayor eficacia el bombardeo de técnicas diseñadas específicamente para que finalices tu compra rápidamente y sin "perder la oportunidad".
Además, para que tus compras sean seguras, existen determinados consejos que debes seguir. Por ejemplo, informarte previamente sobre la oferta real comparando precios en otras plataformas. Así te asegurarás de que el descuento que aparece indicado realmente es tal. Por encima de todo, haz tus compras en sitios web seguros cuando hagas uso de sitios de e-commerce. En tienda, ten cuidado con la calidad del producto y comprueba su buen estado antes de pagar: el caos puede generar más de una sorpresa desagradable al llegar a casa.
Además, no olvides revisar los gastos de envío: en ocasiones pueden aumentar tu factura considerablemente. Una opción es realizar varias compras en la misma web, de forma que este coste quede más repartido y, en conjunto, suponga un porcentaje menor de tu gasto total.
Ten cuidado también con la financiación: cada vez más comercios online y físicos ofrecen pago sin intereses durante varios meses, y elegir este tipo de 'ofertas' financieras siempre será mejor que recurrir a productos de crédito de pago, como las tarjetas revolving. Eso sí, no pierdas de vista tu capacidad de gasto. Especialmente en tiempos de inflación, es importante no lastrar tus ingresos futuros por encima de tus posibilidades, sobre todo con la Navidad (y todos los gastos que ello implica) a la vuelta de la esquina.
En cuanto a tu seguridad, fíjate en los métodos de pago, que deben ser seguros: PayPal, tarjeta de crédito… Existen sellos como ‘Trusted Shops’ que pueden ayudarte a decidir con cabeza. Comprueba también que la web cuente con un apartado de condiciones generales, protección de datos y política de cancelación, y no olvides verificar si tiene a disposición del cliente un servicio de atención por correo o telefónico. En caso de duda, pagar contra reembolso para que puedas comprobar el estado del producto antes de pagar.