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Dos meses después de que Rusia cerrara casi por completo el grifo del gas a Europa y nos temiéramos lo peor de cara a la temporada de frío, nos hemos encontrado con algo que no habíamos visto en todo el año. El precio de la luz ha caído tanto que, por primera vez en todo 2022, se sitúa por debajo de los niveles registrados el año pasado por estas fechas. El mes de octubre la electricidad se pagó un 17% más barata.
Si el coste medio del primer mes del otoño de 2021 fueron 200 euros/MWh, este año han sido 166 euros/MWh. Seguimos en niveles de crisis muy alejados de lo que eran la media de los últimos cinco años, según los datos calculados por el Grupo ASE.
¿Qué ha ocurrido? Es precisamente el gas el que explica, en gran parte, esta caída. Con unas reservas prácticamente llenas en toda Europa, se ha dado la circunstancia de que las plantas españolas no han sido capaces de absorber toda la cantidad de gas licuado que llegaba vía barco. Esta situación ha generado una caída del precio del gas en nuestro país. Nuestra referencia, el MIBGAS, ha estado tres veces más barato que en agosto.
El gas ha caído tanto que ha desactivado el mecanismo para compensar a las centrales eléctricas que lo utilizan como combustible. Esto no había ocurrido desde la puesta en marcha de la excepción ibérica el pasado mes de junio. Estos factores internos, junto a la reactivación de algunas centrales nucleares en Francia, se han trasladado al precio que han terminado pagando los clientes.
"Si se mantienen unas temperaturas más templadas de lo previsto y la demanda de gas de los países asiáticos continúa siendo baja, los precios de MIBGAS seguirán moviéndose en un rango bajo de precios", opinan en Grupo ASE. Hay varios factores que presionarán a la baja el coste de la electricidad en las próximas semanas:
La crisis no está, sin embargo, resuelta. "La volatilidad está asegurada", argumentan en Grupo ASE. Europa tendrá que gestionar una salida del invierno complicada si Rusia no reactiva su envío a través de la principal conexión con Alemania en 2023.
Durante el primer semestre del año, España siguió siendo el quinto país de la Unión Europea con el precio de la electricidad más elevado (tanto si se mide con o sin impuestos), según la oficina estadística europea, Eurostat, Solo nos superaron Dinamarca, Bélgica, Alemania e Italia en el caso de incluir los tributos en la comparativa.
Sin embargo, la evolución de estos precios ha sido muy dispar y ha dependido en parte de las medidas adoptadas por los gobiernos de cada país para luchar contra la crisis. Si se compara el primer semestre de 2022 con el mismo periodo del año anterior, la escala de variaciones registrada va desde cifras negativas (es decir, caídas) en el caso de Holanda a subidas rozando el 70% en el caso de República Checa. España en este ranking se sitúa como el séptimo país donde más se encareció la luz en el primer semestre del año.
Queda por cerrar el segundo semestre de 2022. En estos meses que han transcurrido sabemos que la excepción ibérica ha conseguido abaratar la electricidad en el mercado mayorista español en comparación con otras grandes economías de la UE.