Crecen los problemas para Luis Rubiales. Si el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) está ahora contra las cuerdas tras la oleada de críticas y denuncias que exigen su dimisión tras plantarle un beso en la boca a la jugadora de la selección Jennifer Hermoso, durante la entrega de medallas tras coronarse 'La Roja' campeona del mundo en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, a ello se añade la investigación todavía en curso sobre el traslado de la Supercopa de fútbol a Arabia Saudí.
Mientras multitud de políticos, incluyendo voces desde el Gobierno, reclaman la dimisión a Rubiales, –que aguarda a la asamblea extraordinaria de la RFEF este viernes mientras el Consejo Superior de Deportes ya ha advertido que tomará decisiones sobre el caso analizando las denuncias para determinar si lo eleva al TAD, lo que podría terminar con su inhabilitación si no es cesado antes–, ahora lo que han trascendido son los avances de la investigación del caso que le relaciona con un presunto delito de administración desleal.
Concretamente, la jueza de Majadahonda (Madrid) que investiga el traslado de la Supercopa de fútbol a Arabia Saudí ha pedido información sobre el viaje a Nueva York que realizó con una mujer presuntamente pagado con fondos de la RFEF.
A este respecto, la titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda, que dirige la investigación por un delito de administración desleal, quiere constatar las fechas de ese viaje a Nueva York y ha solicitado en una providencia del pasado julio, adelantada por El Confidencial y a la que ha tenido acceso EFE, los documentos justificativos de dicho viaje.
La jueza investiga desde el año pasado a Luis Rubiales, que aún no ha sido citado a declarar por el traslado de la Supercopa de fútbol a Arabia Saudí, y ha reiterado asimismo la comisión rogatoria que hace meses envió a Andorra en busca de información para la causa.
En el contexto de esta investigación, además, ha solicitado a petición de la Fiscalía información respecto al viaje de Rubiales, que él negó que fuese personal en el marco de una asamblea general de la institución e indicó que el organismo cubrió el desplazamiento a tres trabajadores -él y dos colaboradores de su gabinete en aquel momento-.
De este modo, este procedimiento se suma a las dos denuncias ante el Consejo Superior de Deportes (CSD), dependiente del Ministerio de Cultura y Deporte, por el beso en la boca a Jennifer Hermoso.
Concretamente, a la del presidente de la Escuela Nacional de Entrenadores de Fútbol en España (Cenafe), Miguel Galán, y la presentada por Sumar, que solicita que sea apartado de su cargo y "que se ponga en marcha el protocolo de actuación frente a la violencia sexual".
Galán, además, también llevó este episodio tanto a la Fiscalía de Madrid como a la Fiscalía General del Estado, que todavía no se han pronunciado al respecto.