Supera la muerte de su mujer gracias al deporte: pierde 55 kilos y se convierte en triatleta
Cuando su mujer falleció en agosto de 2019, Bill Bowden pesaba 127 kilos
Una de sus compañeras de trabajo le animó a hacer ejercicio y comer sano
"Yo me había rendido y ella me salvó la vida", admite el hombre, de 52 años
Bill Bowden, un californiano de 52 años, está a punto de acometer su primer triatlón. Pero para llegar hasta aquí tuvo que rehacerse de la muerte de su mujer hace dos años. Su tabla de salvación fue el deporte. Gracias a él perdió casi 55 kilos y encontró un nuevo propósito en vida, según cuenta a 'Fox'.
Bowden recuerda que en su juventud era bastante activo: jugaba al béisbol y practicaba atletismo. Pero tras casarse se dedicó por entero a su trabajo y ese convirtió en una especie de "adicto a la televisión". Todo eso cambió en agosto de 2019, cuando murió la que había sido su esposa durante 26 años. En ese momento Bowden pesaba 127 kilos. "Cuando mi mujer falleció me encontré en una situación totalmente distinta. Realmente no sabía qué hacer ni quién era. No tenía una dirección", admite.
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En aquella época Bowden comenzó a relacionarse con una de sus compañeras de trabajo, una triatleta que también estaba pasando por un momento difícil. Tenía una carrera próxima para la que Bowden acordó ayudarla a prepararse. "A través de eso, ella me tomó un poco bajo su protección. Ella me inspiró, me motivó", dice.
De la bicicleta estática a la de carretera
Se inscribió en un gimnasio y comenzó a hacer ejercicio con regularidad, mientras que su compañera comenzó a alentarle a comer de forma más saludable, le preparaba ensaladas para el almuerzo y le proporcionaba recetas. Aproximadamente ocho semanas después de su viaje de acondicionamiento físico, en febrero de 2020, Bowden cambió de la bicicleta estática en el gimnasio a su primera bicicleta de carretera.
Al principio, su amiga montaba junto a él tres veces por semana, recorriendo entre 15 y 25 kilómetros. "Y luego, antes de darme cuenta, estaba haciendo 80, 90 kilómetros por semana", agregó Bowden. En agosto de 2020, Bowden se unió a un club de bicicletas y en noviembre hizo sus primeros 160 kilómetros.
Mientras continuaba su entrenamiento, Bowden también continuó perdiendo peso, alcanzando los 80 kilos en enero de este año. En ese momento se sometió a una liposucción y perdió otros 9 kilos. Hoy pesa ya alrededor de 73 kilos, pero es un proceso que, según sus palabras, "nunca terminará". Esa mentalidad y motivación lo han llevado al triatlón. En junio decidió entrenar para su primer evento, el Triatlón 2XU Malibu, que tendrá lugar el 2 de octubre. Y ya tiene dos triatlones más previstos para finales de año.
Bowden recuerda que antes de que su compañera de trabajo comenzara a alentarlo a comer mejor y hacer ejercicio sentía que se había "rendido". "[Ella] me motivó y me inspiró en que esa no es una forma de vivir, esa no es una forma de ser", afirma Bowden: "[Ella] me salvó la vida". "Me ha costado mucho llegar aquí", añadió. "Para mí, me di cuenta de que quería una vida mejor. Quería algo más ... honestamente, no pensé que lo tenía en mí para hacer que eso sucediera. Y ahora sé que lo hago y que lo hice".