Esta noche, como cada 5 de noviembre desde hace más de 400 años, los británicos celebran la 'Bonfire Night' o la 'Noche de Guy Fawkes', en la que se lanzan fuegos artificiales por todo el país ara conmemorar el fracaso del atentado del 5 de noviembre de 1605, donde se intentó volar por los aires el Parlamento británico.
A Guy Fawkes le pillaron infraganti la medianoche del 4 de noviembre de 1605, con más de 36 barriles de pólvora listos para explotar en una bóveda bajo la Cámara de los Lores, pero él era solo uno de los miembros de un amplio grupo de conspiradores que prepararon meticulosamente el atentado desde meses atrás. La explosión estaba prevista para el día siguiente, el 5 de noviembre, cuando se iniciara una sesión con todos los lores en el Parlamento británico.
Pero un chivatazo frustró los planes de los conspiradores, la mayoría de los cuales fueron juzgados y ejecutados a finales de enero de 1606. Y ahí nació la leyenda de Guy Fawkes, quien es una personaje odiado por la tradición británica pero que también ha sido encumbrado por la tradición anarquista. Fawkes inpiró al novelista Alan Moore para escribir una de sus novelas gráficas más laureadas, 'V de Vendetta', que fue llevada al cine por James McTeigue.
La mítica careta del personaje, diseñada por el ilustrador David Lloyd con la típica perilla y gigote del propio Hawkes, ya parte de la cultura popular y ha ganado mucha popularidad tras ser utilizada por el grupo 'hacktivista' Anonymous, que la usa como logotipo de su organización.
Aunque parece que Guy Fawkes tenía unas razones más mundanas y políticas para participar en el atentado al parlamento, el inicio de la conspiración surgió por causas religiosas. Fueron un total de 18 meses de planificación meticulosa y en la cabeza del grupo había un total de trece conspiradores, todo ellos jóvenes nobles católicos que querían derrocar a la monarquía protestante. Su intención: volar el Parlamento y acabar de un golpe con el Rey y los lores, lo que llevaría a una revuelta popular y un cambio de poder.
Los principales líderes de la conspiración fueron Robert Catesby, su primo Thomas Wintour y John Wright, quienes comenzaron sus reuniones y primeros planes para planificar un atentado entre los años 1601 y 1603. La mayoría de los nobles católicos eran leales a la corona pero las leyes religiosas de los protestantes cercaban cada vez más a las familias nobles católicas, y de este descontento nació el germen de la conspiración.
Fawkes fue reclutado para la conspiración en abril de 1604 en Flandes por Thomas Wintour, quien buscaba allí el apoyo de la corona Española a la causa (un apoyo que nunca recibió). Fawkes había ido a la escuela con John Wright y era un católico devoto que había vendido todas su propiedades en Inglaterra para viajar por Europa y enrolarse en el bando del reino católico de España en su conflicto contra la república protestante holandesa en la Guerra de los Ochenta Años.
Para cuando Thomas Wintour se encontró con Fawkes, este ya se había convertido en un experto en explosivos. Fawkes odiaba al rey británico y era contrario a la unificación con Escocia. Enseguida se unió a la conspiración y volvió con Wintour a Inglaterra.
Thomas Wintour y Guy Fawkes se encontraron con Robert Catesby y John Wright en un pub de Londres, el 'Duck and Drake Inn'. Con ellos estaba también Thomas Percy, el quinto hombre con el que se conformaría el núcleo de la conspiración. En ese lugar realizaron el famoso "juramento de secreto" sobre una cartilla religiosa, jurando mantener los planes en secreto y no desvelar jamás la identidad de los conspiradores.
Guy Fawkes fue el artífice de toda la infraestructura de la operación para llevar a cabo el atentado. Consiguió alquilar una vivienda cercana al Parlamento inglés, desde donde los conspiradores llegaron a realizar un túnel que llegó hasta los cimientos del Parlamento. Pero, finalmente, el propio Fawkes consiguió alquilar una bóveda que se encontraba bajo la misma Cámara de los Lores. Él mismo fue el encargado de ir introduciendo, poco a poco y solo por las noches, los 36 barriles de pólvora en la cámara, además del resto del material incendiario. Todo estaba preparado y el atentado tuvo que retrasarse varias veces, ya que la reunión prevista del Rey y los lores en la Cámara se retrasó en varias ocasiones.
Tan sólo una carta anónima dirigida a una lore católico para avisarle del peligro de asistir a la sesión en el Parlamento del día de 5 de noviembre (probablemente escrita por uno de los conspiradores) puso en guardia al Rey y, a la postre, haría que los soldados dieran con Fawkes y su cámara repleta de barriles de pólvora.
Tras Fawkes cayeron todos los demás conspiradores y todos ellos fueron ejecutados. Guy Fawkes fue ahorcado, arrastrado por caballos y descuartizado el día 31 de enero de 1606 junto a la Cámara de los Lores que había intentado hacer volar por los aires.