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Los incendios forestales de Australia han traído consigo la muerte de cientos de koalas. Entre ellas, la de Lewis. El koala, que fue rescatado 'in extremis' entre las llamas de un incendio por una mujer, tuvo que ser sacrificado en el centro de rescate donde se recuperaba este martes. Las heridas y quemaduras del animal sufrieron un empeoramiento y no existía posibilidad de mejoría.
Su desgarradora historia consiguió conquistar a medio mundo y recaudar para la causa casi 2 millones de dólares.
Ahora, sus hermanos Paul, Peter y Awnen luchan por su vida en el mismo centro, el Hospital Port Macquarie Koala, con la esperanza de tener un final feliz.
Este koala fue salvado de los incendios de la Reserva Natural del Lago Innes. El fuego hizo que el 90% de su cuerpo se quemase y que su pelaje se volviese de color marrón.
Los trabajadores del hospital afirman que se recupera de manera progresiva.
Fue el primer koala salvado en la Reserva Natural del Lago Innes. Los voluntarios se lo encontraron acurrucado en el suelo. El animal estaba deshidratado y sufría graves quemaduras tras bajar de un árbol en llamas.
Nada más llegar al centro, los trabajadores tuvieron que envolver sus patas en yesos verdes.
Esta hembra consiguió escapar del incendio escalando entre árboles quemados. Sus almohadillas, llenas de quemaduras, le provocaban un dolor insoportable.