"Espío todo lo que hace mi ex en Instagram": señales de que es preocupante el stalkeo

  • Stalkear o, en castellano, cotillear a nuestra expareja es lo más normal del mundo, pero a veces se nos va de las manos y roza la obsesión

Es inevitable sentir curiosidad por las personas que han formado parte de nuestra vida, sobre todo aquellas que han marcado un antes y un después como las exparejas. Si a esto le sumamos lo fácil que es encontrar a cualquier persona en redes sociales tenemos el caldo de cultivo perfecto para que la curiosidad se transforme en obsesión. ¿Cuándo es preocupante el stalkeo? Esta es la pregunta que se hace Ana. Tiene 20 años y acaba de dejarlo con su primer amor, y no puede evitar cotillearle a diario. Hoy daremos algunas pautas para reconocer la obsesión de la mano de su testimonio.

El caso de Ana (20 años):

Mi exnovio y yo lo dejamos hace un par de meses. Fue de mutuo acuerdo y en realidad quedamos como amigos más o menos, algo que al principio me pareció genial pero que cada día me pesa más.

La razón de la ruptura fue la distancia. Desde primero de carrera estábamos en ciudades separadas y al final tantos kilómetros nos pasaron factura. Ni él ni yo estábamos enamorados y al final discutíamos o estábamos más pasotas. A finales de septiembre lo hablamos y decidimos que lo mejor era dejarlo para no seguir pasándolo mal, y los primeros días me sentí liberada pero después me he empezado a agobiar.

Él ha sido mi primer amor. Llevábamos juntos desde el instituto, y no sé estar sola. Me da mucho miedo la independencia, aunque en el fondo sé que es bueno poder valerme por mí misma y descubrir cosas nuevas. El problema es que en vez de disfrutar de la soltería me paso el día entero mirando sus redes sociales.

Veo todos sus stories y fotos de Instagram, me meto en sus 'me gusta' de Twitter y cotilleo su Facebook al milímetro. Sé que no es sano, de verdad, pero no lo puedo evitar. He intentado controlarlo silenciándole e incluso me desinstalé Instagram durante unos días porque es la aplicación en la que más le sigo, pero al final caigo otra vez. Y lo peor de todo es que cuando le veo en una fiesta o con alguna amiga que no conozco me rayo muchísimo, porque pienso que él ya lo ha superado mientras que yo sigo pensando en él.

No sé si esto es normal o no. ¿Cuándo es preocupante el stalkeo

5 señales de alarma

Stalkear o, en castellano, cotillear a alguien es lo más normal del mundo. Casi todas las personas sentimos curiosidad y los seres humanos somos sociales, así que a veces enfocamos dicha curiosidad en la vida de los demás. Algunos siguen a influencers, otros ven realitys en la televisión y otros se centran en sus amigos y conocidos. Lo importante es saber discernir la fina línea que separa la curiosidad sana de la obsesión, sobre todo en lo relacionado con el amor y los corazones rotos.

Hay algunas señales de alarma que pueden indicar que el stalkeo se te está yendo de las manos:

  • Se alarga durante meses

Si la ruptura es reciente, no resulta preocupante un poquito de stalkeo. Lo raro sería olvidarse totalmente de esa persona y no sentir la más mínima curiosidad por su vida, sobre todo si la relación ha acabado bien. En cambio, cuando el cotilleo se alarga más de un mes ya deberíamos preocuparnos un poquito.

  • Te quita tiempo de otras tareas más importantes

Una cosa es entrar en el Instagram de tu ex de vez en cuando para ver qué tal le trata la vida y otra muy distinta hacerlo cada hora todos los días. Cuando el stalkeo te quita tiempo de estudio, de trabajo, de sueño, de tus actividades de ocio o de tu vida social, es que el asunto se está desmadrando un poquito.

  • Te impide rehacer tu vida

Al cotillear constantemente a tu expareja, inevitablemente le tienes presente en tu cabeza. Si comparas a todos tus ligues con tu ex y te cuesta salir porque sigues anclado en el duelo, lo más normal es pedir ayuda. No somos superhéroes y es normal necesitar tiempo y esfuerzo para superar una ruptura. El problema es cuando la forma de gestionar el dolor es cotilleándole día sí y día también. Como dice la canción “no es amor, es una obsesión”.

  • Has intentado dejarlo y no has sido capaz

La característica común a todas las adicciones es haberlo intentado dejar alguna vez y haber recaído. Pasa con las drogas, pasa con el juego patológico, pasa con la comida basura y pasa con el amor. Evidentemente los riesgos de consumir heroína y los de stalkear a tu ex no tienen comparación, pero al final el objetivo es dejar de lado la adicción, independientemente de su gravedad.

  • Te provoca malestar

Y finalmente la señal más importante es que te encuentres mal a raíz del stalkeo. Es posible que sientas ansiedad o tristeza e incluso que te cabrees con tu ex o contigo mismo. Hay muchas formas de experimentar malestar en una ruptura, sobre todo cuando no la superamos bien.

Si te has sentido identificado con alguna de las señales, pide ayuda a tus amigos y familiares y si lo ves necesario ponte en manos de un profesional de la salud mental.