Hay muchas formas de manifestar una baja autoestima, aunque normalmente tendemos a asociarla con el aspecto físico. Algunas personas se sienten inseguras respecto a su personalidad y otras respecto a su inteligencia. Sea como sea, las consecuencias de la falta de amor propio no sólo nos afectan a nosotros, sino que también pueden perjudicar nuestra relación de pareja. Esto es lo que le sucede a Vicky, una chica de 22 años que siente constantemente que su pareja merece algo mejor, lo que ha dado pie a muchas discusiones y problemas con su novio. Hoy analizaremos su caso y recopilaremos varios consejos para que nuestra autoestima en el amor suba como la espuma.
"Mi nombre es Vicky y tengo 22 años, y desde hace 7 meses estoy saliendo con un chico. En teoría todo debería irnos muy bien, pero no es así, y haciendo autocrítica me he dado cuenta de que parte de la responsabilidad es mía.
En mi anterior relación lo pasé bastante mal porque mi ex me engañó con otra chica. La relación era tan tóxica que incluso llegué a pensar que la culpa era mía por no ser suficiente para él y obligarle a buscar fuera lo que yo no le daba. Era superdependiente y muy insegura, y cuando me enteré de que me había engañado la cosa fue a peor. Aun así le perdoné y meses después me dejó él. Fue muy duro para mí y me costó salir de ese agujero.
Durante el tiempo en que estuve soltera trabajé mucho mi autoestima y cuando creí que ya estaba a tope, conocí a mi actual novio. El problema es que los fantasmas del pasado han resurgido y constantemente tengo la sensación de que no soy suficiente para él.
Mi novio tiene muchos amigos y muchas aficiones, además es un chico inteligente y divertido. Yo tengo amigos, pero la mayoría viven fuera y tampoco tengo ninguna afición en especial. Me gusta la música, leer, jugar a juegos de mesa y la naturaleza. Es como que me siento muy aburrida para él, que es un chico todoterreno.
Al final cada vez que sale por ahí me pongo celosa porque estoy convencida de que puede conocer a alguien mejor, y eso hace que discutamos. Él intenta ayudarme, pero yo no me dejo ayudar y sé que ese es mi principal problema".
Es normal que nuestra autoestima se vea un poco perjudicada al salir de una relación repleta de infidelidades y dependencia emocional. La decisión de pasar un tiempo soltero o soltera curando nuestras heridas es muy sabia, pero al conocer a alguien nuevo pueden aflorar sentimientos como le ha sucedido a Vicky. Una vez identificamos nuestras inseguridades, tenemos que trabajar en ellas.
Una cosa es aprender del pasado y otra revivirlo constantemente. Tu pareja actual no es tu ex y tú tampoco eres la misma persona que eras cuando estabas con él. Has aprendido de la experiencia, has madurado y has crecido psicológicamente. Por suerte, ahora sabes mejor que nunca qué es lo que te hace feliz y qué es lo que te provoca malestar en una pareja, así que aprovecha esa sabiduría para sacar el máximo partido a tu relación.
A lo mejor en su momento no supiste o no pudiste enfadarte con tu ex ni tampoco le dijiste que te hizo daño, pero no puedes pagar con tu pareja actual los sentimientos desagradables que te genera el recuerdo de tu anterior relación.
Lo ideal es que nuestra pareja nos apoye en los malos momentos, pero no podemos poner sobre sus hombros el peso de nuestra salud mental. La responsabilidad de mejorar tu autoestima y de curar tus heridas psicológicas es solo tuya.
A veces generamos expectativas demasiado altas cuando comenzamos una relación y cuando no se cumplen nos sentimos muy decepcionados con nuestra pareja. Idealizar a alguien es peligroso, porque nunca podrá comportarse como tú te esperas. Por eso es importante ser realistas en el amor y, sobre todo, no adjudicar el papel de salvador a nuestro nuevo novio o novia. Sólo nosotros podemos salvarnos.
Si todos los días te dices una y otra vez lo torpe, aburrido y tonto que eres, al final te lo acabas creyendo. Lo mismo sucede cuando nos decimos cosas positivas.
Intenta escribir todos los días tres cosas buenas que te hayan sucedido a lo largo del día y que sean responsabilidad tuya. Por ejemplo, petarlo en el trabajo, armarte de valor e ir al cine por tu cuenta… Cualquier cosa vale siempre y cuando te haga sentir mejor y dependa de ti.
Aunque estés en una relación, es fundamental mantener tu independencia. Estoy segura de que lo que te apetece es pasar el día entero con tu novio o con tu novia, pero hay vida más allá. No descuides tus amistades y tampoco tus aficiones. Incluso puedes conocer gente nueva o interesarte por hobbies que nunca habías pensado.
Es importante mantenernos activos física, mental y socialmente. No descuides tu bienestar psicológico priorizando el de otra persona, porque al fin y al cabo tú eres la persona con la que vas a pasar toda tu vida. Trabaja en tu amor propio.
Si ya has intentado aplicar estos consejos, pero no has podido, a lo mejor un psicólogo puede ayudarte. A veces o bien no conocemos las herramientas para mejorar nuestro bienestar psicológico, o bien no sabemos como ponerlas en marcha. En cualquier caso, pedir ayuda profesional es un acto de valentía y te permitirá crecer como persona.