El libro Guinness de los Récords ha certificado que, con 21 años y tres meses de vida, un chihuahua de Florida, en Estados Unidos, que atiende al nombre de Tobykeith, es el perro más viejo del mundo.
Tobykeith, cuyo nombre está inspirado en un cantante de música country, nació el 9 de enero de 2001 y fue adoptado por Gisela Shore cuando tenía unos pocos meses. En declaraciones realizadas esta semana a los medios de Florida, Shore dice que Tobykeith, al que define como "su pequeño guardaespaldas", es "dulce, gentil y cariñoso".
La mujer, que vive con su longeva mascota en Greenacres, a unos 90 kilómetros de Miami, supo hace 20 años de un matrimonio de personas mayores que no podía seguir cuidando de su cachorro, por lo que pretendían darlo en adopción.
Contactó con los dueños del chihuahua, que por entonces se llamaba Peanut Butter (mantequilla de maní), y decidió adoptarlo.
En las últimas dos décadas, Shore se ha ocupado de más de 150 perros y cachorros atendidos por la organización Peggy Adams Animal Rescue, en donde trabaja como voluntaria.
Cuando Tobykeith cumplió 20 años, Shore pensó que su mascota podía ser el perro más viejo del mundo y acudió al libro Guinness de los Récords. Esta organización certificó con fecha del 16 de marzo de 2022, aunque se ha conocido ahora, que efectivamente lo es.
Según Shore, la noticia la llenó de felicidad a ella y a sus amigos y, para celebrarlo, Tobykeith recibió un baño, una sesión de manicura y un paseo en automóvil. El perro más viejo del mundo convive con una bulldog americana de 7 años llamada Luna y con Lala, de tres años, una perra sin raza.
A Tobykeith le gusta tumbarse al sol y dormir la mayor parte del día, pero antes solía disfrutar de largas caminatas y de jugar.
"Me encanta el reconocimiento de saber que ha tenido una vida larga y saludable conmigo. Lo queremos mucho y lograr este récord es testimonio del hogar amoroso que le hemos brindado. Tobykeith es una gran bendición. Soy muy afortunada de tenerlo todavía en mi vida", concluyó su dueña.