Un bañista de la playa de Bakio, en Vizcaya, se ha llevado un gran susto que tardará en olvidar.
El hombre se fue a nada un rato en el mar y cuando volvió al sitio donde había dejado sus pertenencias, se encontró en su toalla un enjambre de abejas.
Al parecer, la abeja reina había viajado con él en la silla de la playa y atrajo al resto de las abejas que en muy poco tiempo.
Tras el sorprendente hallazgo, hubo que llamar a los bomberos para que capturaran a la reina y así se llevase la colmena a otro lugar más seguro para todos.