El fenómeno “Trini”, que viene resonando estos últimos días, es una clara prueba de cómo las redes sociales pueden actuar como una poderosa plataforma para la difusión de información falsa. “Este tipo de situaciones revelan una verdad incómoda sobre nuestra sociedad actual: la falta de escrutinio y la aceptación ciega en lo que está de moda”, señala Ximo Lizana, profesor experto en Inteligencia y Neurociencia de la Universidad Europea.
Pero ¿quién es Trini? Eso mismo se preguntan cientos de usuarios en redes sociales. La respuesta es fácil, Trini no es nadie, es un producto de la invención de un conocido TikToker, cuyo nombre real es Marcos de Vicente, pero que se hace llamar @Kappah, que alentó a sus seguidores a inventarse una polémica y extenderla por toda la red. Con un simple conversación in situ, este estudiante de cine decidió inventarse un rumor sobre una influencer llamada Trini, eligiendo este nombre casi al azar por su sonoridad y buen gancho. De hecho, ni siquiera el rumor estaba argumentado, porque el mensaje que pidió a sus seguidores que difundieran era del tipo: "¿Has visto lo que ha pasado con Trini?", sin necesidad de crear un globosonda que fuera negativo o que hiciera daño a los demás.
Numerosos creadores de contenido se unieron a iniciativa, llegando a convertirla en tendencia, mediante vídeos en los que se mostraban muy afectados, afirmando “no poder creerse lo que había pasado con Trini”. Esta acción demuestra que las redes sociales se posicionan como la principal fuente de información para muchos, pero es importante tener en cuenta que ésta no siempre es verídica. La capacidad para discernir entre realidad y ficción en las redes sociales se ha convertido en uno de los grandes retos del momento actual. “Quizás estamos siendo testigos de un cambio de paradigma, donde el talento se eclipsa ante la superficialidad de la apariencia”, señala Lizana.
Esta no es la primera vez que sucede algo así, en 2017 un periodista decidió coronar a 'The Shed at Dulwich' como uno de los mejores restaurantes de Londres en TripAdvisor, sin embargo, este restaurante nunca existió. Otro ejemplo es el caso de Almudena Ripamonti, la actriz española que en colaboración con H2H, una empresa de Marketing de Influencia simuló ser una famosa influencer para asistir a eventos exclusivos y convertirse en el centro de todas las conversaciones.
Lucía Andaluz, profesora PhD experta en Fake News de la Universidad Europea, nos revela las principales características de este tipo de noticias. Según explica, la intención principal “es provocar una emoción, buscan conmovernos, indignarnos o atemorizarnos, en lugar de generar una reflexión en los individuos que las leen”. Además, indica que “suele tratarse de mensajes cortos que se propagan a través de las redes sociales, formando patrones gracias a los cuales se conectan usuarios que se identifican entre sí”. Por tanto, para decepción de muchos, Trini sólo ha sido un exitoso experimento social, salido de la cabeza de un joven creador de contenido.