Encarnación García Campos es una notaria de Lumbrales, un municipio de la provincia de Salamanca. Recientemente, ha publicado en su perfil de Twitter una historia que ha vivido en primera persona y que se ha hecho viral, desatando las risas de los usuarios.
"Creo que ya tengo la mejor anécdota de mi profesión hasta que me jubile. Las noches que me quedo trabajando en la notaría pido la cena a un bar del pueblo: les mando un WhatsApp, lo preparan, lo recojo, sigo trabajando", indica en un tuit antes de entrar en más detalles.
En otro mensaje, Encarnación explica que "en vez de mandarle el mensaje a la dueña del bar, sin querer SE LO HE MANDADO A UNA CLIENTA QUE SE LLAMA IGUAL Y LA SEÑORA ACABA DE PRESENTARSE EN LA NOTARÍA CON LA CENA Y UNA COCA-COLA, me quiero morir de la vergüenza".
A continuación, relata que "imagina que te escribe un WhatsApp a las 10 de la noche de un viernes la notaria de tu pueblo con la que firmaste unas escrituras hace un tiempo para pedirte que le hagas la cena. No entiendes nada, pero se la preparas y se la llevas a la notaría. No puedo conmigo misma".
García Campos subraya en otro mensaje que "además, la señora que me ha traído la cena hablaba de traérmela cuando se dirigiese AL MISMO BAR al que yo quería pedirlo realmente porque, casualidades, ella estaba a punto de salir de casa para ir a cenar al mismo sitio. Así que la conversación incluso era racional".
"Me ha dado un ataque de risa, pero es que me lo he imagino tan real, tan de viernes a las 10 de la noche, tan charming la señora que aparece... MAGNO", "Qué anécdota tan simpática y qué solidarias son las señoras de los pueblos. Bravo por la cocinera!", "Maravilla absoluta", "Creo que es lo mejor que he leído en mucho tiempo" o "Casi infarto de la risa" fueron algunos de los comentarios de los internautas de la red social.