La actriz Jamie Lee Curtis ha recibido el León de Oro Honorífico en el Festival de Cine de Venecia. Descalza ha subido al escenario, donde ha recogido un galardón que ha dedicado a las personas que sufren violencia y sus padres, los actores Tony Curtis y Janet Leigh.
La actriz estadounidense Jamie Lee Curtis ha dedicado su premio en el Festival de Venecia, muy emocionada, a las víctimas de violencia y discriminación racial, sexual o ideológica. "Gracias de nuevo por este gran honor. Lo dedico a las víctimas y supervivientes a la violencia de todo tipo, ya sea física, política, espiritual, sexual, psicológica, cultural, emotiva, doméstica", ha dicho en una gala en la que se ha atrevido con el italiano.
También ha recordado a quienes padecen "la violencia y el odio que proviene de la discriminación de color o perpetrada contra quienes osan pensar de manera independiente". "Esta tarde acepto con orgullo este premio con la mente clara y sobria y con el corazón abierto e increíblemente grato", ha terminado.
Jamie Lee Curtis ha estado acompañada por David Gordon Green, el director de "Halloween Kills", la última entrega de la emblemática serie de terror "slasher" que ha sido estrenada mundialmente en el certamen veneciano.
La actriz, de 62 años, se descalzó para subir al escenario del Palacio del Cine, vestida con un largo vestido rojo, y aseguró sentirse "muy emocionada" por este premio que también se lo ha dedicado a "la lealtad de los amantes del cine" que apoyaron su vida creativa.
Y se emocionó al hablar de su familia y, especialmente, al recordar a sus padres, los míticos actores Tony Curtis (1925-2010) y Janet Leigh (1927-2004). Su madre fue la actriz de "Psicosis" (1960), la obra maestra de Alfred Hitchcock. "Ellos estarían increíblemente orgullosos de que su hija esté aquí siendo honrada de este modo".
El Festival de Venecia, que concluirá el próximo sábado con la asignación del León de Oro y el resto de premios, este año también ha laureado con su galardón honorífico al cineasta y actor Roberto Benigni, el autor de la oscarizada "La vita è bella" (1997).
El discurso de Lee Curtis sido uno de los más aplaudidos en esta edición número 78 del Festival de cine de Venecia.